Desde el exilio del opositor venezolano Edmundo González, España se ha convertido en el epicentro de la lucha por la restauración de la democracia en Venezuela. El Congreso y el Senado reconocieron a González como presidente electo, una postura que fue replicada por el parlamento Europeo este jueves.
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EL TIEMPO conversó con Juan Pablo García, exdiputado venezolano en el exilio y quien fue parte de la delegación que estuvo en el Senado español impulsando el reconocimiento de González.
Para el exdiputado, que huyó de Venezuela en 2019 tras amenazas del Gobierno, la comunidad internacional está convencida de los pasos a seguir. Asegura que el mismo Gustavo Petro debería alinearse en el reconocimiento del triunfo de Edmundo González porque "no es cuestión de ideologías sino de humanidad y derechos humanos".
¿Cómo se logró que el senado español reconociera a Edmundo González como presidente electo de Venezuela?
Igual a lo que pasó la semana pasada en el Congreso, se aprobó el reconocimiento a Edmundo González por una votación de 149 votos a favor, pero también se pide que se respeten los derechos humanos y le dice al Gobierno de Pedro Sánchez que debe reconocer a Edmundo González como el presidente electo de los venezolanos.
El agradecimiento a todas las fracciones que votaron a favor y se pusieron del lado de la verdad de lo que pasó en Venezuela. Esto nos va a ayudar a que pase lo mismo en el parlamento europeo porque aquí lo que se trata es de conciencia, de sensibilidad, de ser humanitario con Venezuela, donde hay una crisis económica, social y política, pero donde hay una persecución, donde se están cometiendo crímenes atroces.
En su informe, la Organización de las Naciones Unidas vuelve a decir que sigue la represión y que se siguen cometiendo crímenes de lesa humanidad, por lo tanto lo que ocurrió en España en el Senado va a seguir ocurriendo con parlamentos del mundo.
¿Qué garantiza que el Parlamento europeo pueda reconocer a Edmundo González?
Se tienen los votos. Las fracciones han conversado y han manifestado la disposición de reconocer a González Urrutia como el presidente electo en Venezuela, es lo más sensato y yo creo que el mundo está cambiando. Yo creo que los políticos, los europeos están conscientes de lo que está pasando en Venezuela, que es una barbarie que no ha cesado, que se siguen cometiendo crímenes de lesa humanidad, que se está violentando y se pretende robar la voluntad ciudadana que se expresó el 28 de julio y esto es un delito muy grave y que los demócratas del mundo deben enfrentar reconociendo el triunfo de Edmundo González Urrutia.
Usted es parte del exilio. ¿Cómo puede la diáspora y ustedes los políticos en el exilio apalancar para que desde España y los distintos países maniobren para recuperar la democracia en Venezuela?
Los venezolanos dentro del país han hecho el trabajo, lo siguen haciendo y lo continuarán haciendo. Pusimos los votos, la gente fue a votar sin temor y le demostró al mundo que se cansaron de la tiranía. Contra todo pronóstico, con los obstáculos que hubo, porque fue una elección atípica y sin embargo fuimos y vencimos y ahí están las pruebas.
Los que estamos afuera, perseguidos, los que salieron de Venezuela buscando calidad de vida, un futuro, buscando la forma de mantenerse con vida, también estamos haciendo el trabajo y estamos precisamente ante las instituciones, ante los organismos internacionales, denunciando y haciendo el llamado a la comunidad internacional a que pongan el ojo, a que no nos abandonen, a que nos acompañen en esta lucha, a que tenemos que seguir insistiendo que se reconozca a Edmundo González como el presidente electo de los venezolanos.
¿Qué puede hacer la comunidad internacional por Venezuela?
Es muy importante, no solo la comunidad internacional, también pidiéndole a los organismos internacionales que actúen, como la Corte Penal Internacional para que acelere los casos de crímenes de lesa humanidad donde está involucrado y donde debe estar imputado Nicolás Maduro y su cadena de mando para que se le dé celeridad a ese proceso para que puedan rendir cuenta ante la justicia. Yo creo que tanto la justicia internacional como la justicia universal llegó y llegó el momento de que ya le pongan un fin a esto. Por eso es muy importante la presencia de la diáspora, de esos 8’000.000 de ciudadanos que estamos fuera del país que también andamos denunciando y llevando el mensaje a la comunidad internacional y a todos los organismos internacionales de que no nos pueden dejar solos.
Sobre el futuro de Edmundo González, ¿qué tan factible es que el 10 de enero Edmundo González asuma la presidencia en Venezuela y no en el exilio?
Todo indica que hay una comunidad internacional alineada que busca que se respete la voluntad popular y cuando tú ves los pronunciamientos de los países europeos, de los países en América, ves los pronunciamientos incluso de quienes fueron hasta ayer sus aliados y muchos que continúan siendo sus aliados pero que no están de acuerdo con esto, yo puedo decirte que hoy todo es muy distinto a lo anterior.
Pero, ¿qué tiene de distinto?
Edmundo González Urrutia es producto de una elección popular, es producto de una votación donde ganó por paliza, entonces esa voluntad no se puede robar fácilmente. Esa voluntad tiene incidencia en los países demócratas que reconocen que no se puede vulnerar o darle un golpe a la voluntad popular del soberano. Yo no tengo duda, por los últimos acontecimientos, que el 10 de enero Edmundo González se juramentará como presidente de la República y como comandante en jefe de la Fuerza Armada Nacional.
¿Cuál es el papel que debería tomar Colombia a partir de este momento?
Lo más sensato de una persona que dice ser demócrata y defender los derechos humanos es reconocer a Edmundo González Urrutia como presidente, eso es lo que tendría que hacer Gustavo Petro como presidente de los colombianos porque Maduro no va a enseñar las actas, y las actas que se publicaron son las actas que emitió el CNE, son actas oficiales, ahí no hay vuelta atrás.
Lo que tiene que hacer Petro y su equipo es apretarse bien los pantalones y reconocer a Edmundo Gonzalo Urrutia. Pienso que al final va a tener que hacerlo.
¿Aunque eso implique romper relaciones con Nicolás Maduro?
Pero si se rompen las relaciones con Maduro va a ser por muy poco tiempo porque Maduro debe entregar el 10 de enero. Es cuestión de no imponer intereses personales sobre los intereses de los ciudadanos, de los derechos humano, porque no es un problema de ideología de derecha o de izquierda, es un problema de derechos humanos, que están matando a la gente, que son 8’000.000 millones que estamos fuera de nuestro país y lo que viene para Colombia, para Brasil, para América y para el mundo es que es un país que se puede vaciar y eso es problema también para los países hermanos como Colombia y para la seguridad del continente.
Pasando a otro tema, el chavismo mostró una carta firmada por Edmundo González en la que reconoce las instituciones del chavismo para poder obtener su salvoconducto, ¿cómo explicarle esto a la comunidad internacional?
Todo está claro. Edmundo lo dijo y lo dijo su abogado también. Todos lo sabemos y la comunidad internacional lo sabe: todo lo que tú puedas obtener por coacción no existe, es nulo, de nulidad absoluta. Esto es un desespero del chavismo ante la pérdida inminente del poder. Es un delito coaccionar a alguien para hacer cualquier cosa. Eso para nosotros no existe y para la comunidad internacional eso no existe porque la verdad fue lo que pasó el 28 de julio y contra eso no hay coacción que pueda y Edmundo lo ha ratificado hoy, que no va a traicionar la voluntad popular.
¿Cuáles son las próximas acciones de ustedes en Madrid?
Seguimos llevando el mensaje a la comunidad internacional, seguimos llevando el mensaje a las instituciones y a los organismos internacionales, a la Corte Penal Internacional, de que es momento de que se actúe.
ANA MARÍA RODRÍGUEZ BRAZÓN - CORRESPONSAL EL TIEMPO - CARACAS