Oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP, por sus siglas en inglés) en el Puerto de Entrada de Progreso se encontraron esta semana con un hombre que intentaba cruzar la frontera con un permiso legal, pero tenía una orden de arresto pendiente por un delito grave.
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Se trató de Jesús Antonio Limón, ciudadano estadounidense de 41 años, quien fue detenido el 18 de septiembre en el Puente Internacional Donna tras una inspección secundaria realizada por los agentes fronterizos, tal como detalló CBP en un comunicado oficial.
Limón fue remitido a esta segunda inspección como parte de los protocolos de seguridad de CBP, que incluyeron el uso de verificación biométrica y bases de datos federales. Fue entonces cuando los oficiales descubrieron que Limón era buscado por la Oficina del Sheriff del Condado de Hidalgo bajo una orden de arresto por agresión sexual agravada y abuso sexual continuo de un menor.
La captura de Limón fue posible gracias al uso del Centro Nacional de Información Criminal (NCIC, por sus siglas en inglés), una base de datos centralizada diseñada para compartir información entre agencias policiales en todos los niveles. Esta base de datos es clave para que los oficiales de CBP puedan detener a personas buscadas por una amplia gama de delitos graves, desde homicidio y lavado de dinero hasta narcotráfico y abuso infantil.
CBP lo detuvo cuando quería ingresar a California en bus
De acuerdo a lo que detalló CBP en un comunicado del día de ayer, se detuvo a un hombre que intentaba ingresar a California en bus desde México a través del puerto de entrada de San Ysidro, debido a que llevaba una enorme carga de cocaína.
Los agentes incautaron 84 kilos de la sustancia que transportaba el conductor de un bus comercial de pasajeros. La sustancia ilegal estaba escondida en el compartimiento trasero, dividida entre 70 paquetes; el descubrimiento se dio gracias al equipo K9 de CBP, que mediante técnicas no intrusivas detectaron el cargamento ilegal.