En los distintos puertos de entrada erigidos en las fronteras de Estados Unidos, los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) a menudo utilizan un sistema de inspección no intrusiva (NII, por sus siglas en inglés) con el objetivo de detectar y prevenir el contrabando así como el tráfico de personas inadmisibles.
Mediante un documento oficial, la agencia encargada de la protección fronteriza explica que las tecnologías implementadas en los puertos de entrada terrestres, marítimos y aéreos del país incluyen sistemas de imágenes de rayos X y rayos gamma a gran escala, así como diversas tecnologías portátiles y de mano.
En ese sentido, las tecnologías NII se consideran multiplicadores de fuerza que permiten a los oficiales de CBP supervisar o examinar una mayor parte del flujo de tráfico comercial, a la vez que facilitan el flujo de comercio, carga y pasajeros legítimos.
Actualmente, CBP cuenta con 309 sistemas NII a gran escala desplegados en los puertos de entrada estadounidenses y entre ellos.
En su lucha contra el terrorismo y el narcotráfico, una parte importante consiste en el escaneo de todos los medios de transporte y contenedores que llegan con equipos de detección de radiación antes de su liberación del puerto de entrada. El equipo de detección nuclear y radiológica de CBP incluye Monitores de Radiación de Portal, Dispositivos de Identificación de Isótopos de Radiación y Detectores Personales de Radiación en 329 puertos de entrada a nivel nacional.
CBP cuenta con 309 sistemas NII a gran escala desplegados en los puertos de entrada estadounidenses. Foto:CBP
¿Para qué usa CBP el sistema de inspección no intrusiva?
En su página web, CBP señala que a menudo utiliza el sistema de inspección no intrusiva en los puertos de entrada a Estados Unidos para inspeccionar cargamentos y medios de transporte en busca de contrabando, como parte de su misión de detener las importaciones ilícitas y facilitar los viajes y el comercio legales.
El objetivo principal de este sistema es detectar y prevenir el contrabando, incluyendo drogas, dinero no declarado, armas, municiones y otras mercancías ilegales, así como el tráfico de personas inadmisibles a Estados Unidos, con un impacto mínimo en el flujo de viajes y comercio legítimos.