Por qué nunca debe vender un carro con traspaso abierto: los riesgos de hacerlo y sin actualización en el Runt

hace 2 semanas 39

Muchas personas prefieren comprar carros usados, ya que suelen ser más económicos. No obstante, a veces optan por el 'traspaso abierto', una modalidad que puede ser riesgosa para para el vendedor y comprador.

Según explicó 'Autofact', esto ocurre cuando se vende un carro, pero no se hace el cambio oficial de propietario en los registros. Es decir, solo se firma el contrato de compraventa u otro documento, pero no se completa el trámite legal para que el vehículo quede a nombre del comprador.

Muchos ciudadanos lo hacen como 'acto de confianza', pero esto puede puede terminar en numerosas consecuencias negativas. Debido a que se trata de una venta sin formalizar, el vendedor sigue siendo el propietario legal y quien debe responsabilizarse sobre cualquier tema que surja con el vehículo.

En conversación con la Ventanilla Única de Servicios, especio operado por el Consorcio Circulemos Digital para la atención de la ciudadanía interesada en trámites y servicios de movilidad, un ciudadano reveló que ha acumulado varias deudas tras la venta de su carro bajo esta modalidad.

El hombre vendió su vehículo y se olvidó de este. Se mudó a otra casa y no tenía actualizados sus datos en el Runt, así que nunca supo de los más de 10 comparendos, liquidación y pago de impuestos de más de cinco años, y pagos del Soat desde que su venta en 2019 hasta 2024.

"Todo esto se hubiera evitado si hubiera hecho el traspaso del carro en el mismo momento de la venta, les recomiendo mantener los datos actualizados para enterarse a tiempo de las cosas y traspasar sus carros apenas los venda", sugirió el ciudadano, quien tuvo que radicar un trámite de traspaso a persona indeterminada para legalizar la venta de hace más de cinco años.

Los riesgos de vender un carro con traspaso abierto y sin actualización en el Runt

A la hora de comprar o vender un vehículo usado, asegúrese de legalizar el cambio de propietario lo más pronto posible. Además, no se olvide de mantener sus datos actualizados.

De lo contrario, el vendedor, quien todavía aparecería como el dueño ante las autoridades, podría tener que pagar multas e impuestos por un carro que ya no le pertenece.

Además, podría también verse implicado en problemas judiciales si el vehículo se ve involucrado en accidentes de tránsito o si este es usado con fines delictivos.

Por su parte, el comprador podría también tener problemas al no tener el vehículo a su nombre. Por ejemplo, el vendedor podría desconocer el trato y reclamar el carro, ya que seguiría siendo el dueño legal.