Bajo este escenario, exploraremos las razones psicológicas detrás de este hábito, apoyados en las opiniones de expertos como el psicólogo clínico Matthew Childs y la psicóloga clínica Rachel Wien, en el medio especializado Elite Daily.
Tocar o jugar con el cabello puede tener múltiples significados, dependiendo de la situación. Según el psicólogo Matthew Childs, esta conducta suele ser un "tic nervioso" o una respuesta a la ansiedad.
Es una forma en la que el cuerpo maneja las emociones que se encuentran en el subconsciente. Si bien no siempre indica un problema grave, sí puede reflejar preocupaciones relacionadas con nuestra apariencia o cómo nos sentimos en una situación determinada.
Jugar con el cabello como respuesta emocional, un motivo frecuente
En situaciones de ansiedad, como una entrevista de trabajo, una cita o una conversación importante, el acto de tocarse el cabello puede ser un mecanismo de auto calma. Rachel Wien, psicóloga clínica, explicó que este hábito se convierte en una forma de lidiar con la incomodidad de ciertos momentos.
Al realizar esta acción, nos ocupamos físicamente y nos ayuda a disminuir la tensión interna que sentimos. Es como un "autoabrazo" que alivia momentáneamente las preocupaciones.
- El cabello como herramienta para la autoestima
Otra razón que podría estar detrás de este hábito es cómo nos relacionamos con nuestra propia imagen. Según Childs, el cabello juega un papel importante en la forma en que nos percibimos físicamente.
Para algunas personas, puede ser una manera de sentirse más seguras, especialmente si consideran que su cabello es una característica positiva de su cuerpo. Esta acción también podría reflejar un deseo de aumentar la confianza en su apariencia.
Por otro lado, aunque muchas veces este hábito se asocia con nerviosismo, también puede tener connotaciones más positivas. En el contexto de las relaciones interpersonales, especialmente en situaciones de coqueteo, jugar con el cabello puede ser una forma sutil de llamar la atención y demostrar interés en otra persona.
Es importante destacar que el tocarse el cabello, aunque común, puede volverse un problema si se realiza de manera excesiva o incontrolable. En estos casos, se recomienda buscar la orientación de un profesional de la salud mental para tratar el trastorno y aprender estrategias de manejo del estrés, aclaran desde el portal citado.