En tiempos de crecimiento poblacional en muchas zonas de Florida y del resto del país, hay un caso que llama la atención. Mientras varias regiones suman nuevos residentes, hay un punto del estado que empieza a perder atractivo entre quienes ya vivían allí.
Se trata del condado de Miami-Dade, que entre 2023 y 2024 vio salir a unas 67.000 personas, según datos publicados en marzo por la Oficina del Censo. Muchos se trasladaron a otras partes de Florida o a diferentes estados, en busca de alternativas más asequibles o tranquilas.
Lo llamativo es que, al mismo tiempo, la migración internacional hacia esta zona alcanzó cifras récord. Aunque miles se van, los inmigrantes siguen apostando por este condado como punto de llegada, lo que genera un cambio demográfico constante.
¿Por qué muchos residentes decidieron dejar Miami-Dade?
El aumento del costo de vida, los alquileres elevados y la búsqueda de mayor tranquilidad llevaron a muchos a mudarse fuera del condado. También influyeron factores como el tráfico constante y, en algunos casos, las barreras del idioma.
Ian Ondek, quien estudió Arquitectura en la Universidad de Miami, contó a NBC 6 que, después de siete años, vivir en el sur de Florida se volvió "insostenible". Al renovar el alquiler, el precio subió de US$2.000 a casi US$2.400 por mes, lo que lo llevó a buscar otras opciones con su esposa.
Los inmigrantes siguen eligiendo este condado de Florida
Aunque miles de habitantes decidieron irse, Miami-Dade recibe una gran cantidad de inmigrantes. Según el Censo, entre 2023 y 2024 el condado sumó cerca de 124.000 personas por migración internacional neta.
Sin ese flujo, habría perdido población, ya que los nacimientos no alcanzaban para compensar los fallecimientos y el éxodo. Con más de 2,8 millones de habitantes, se mantiene como el séptimo condado más poblado de Estados Unidos.
Para Kristie Wilder, demógrafa de la Oficina del Censo, esta tendencia se explica porque “la migración internacional está teniendo mucha influencia en el crecimiento del condado”.