Pareja descubrió que un oso vive en el sótano de su casa en California y aseguran que no le tienen miedo

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Un sorprendente hallazgo en la casa de Bob y Susan Nesler, residentes de Sierra Madre, California, Estados Unidos, ha causado gran revuelo en los medios de comunicación. 

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La pareja de la tercera edad descubrió que un oso negro ha estado viviendo en el sótano de su hogar, y a pesar de lo inusual de la situación, aseguran que no sienten temor por la presencia del animal.

Excrementos misteriosos revelaron la presencia del oso

Según el informe del canal 'KTLA 5', la pareja notó algo extraño en su propiedad cuando comenzaron a encontrar excrementos en su jardín. Sin tener idea de su origen, investigaron, solo para descubrir que un vecino había visto al oso entrando a su casa por un agujero bajo el porche. Tras la llamada del vecino, la Policía acudió al lugar y confirmaron que el animal había establecido su guarida en el sótano de los Nesler.

Susan, sin mostrar señales de preocupación, comentó al medio: “Si fuera un oso pardo, haría las maletas y me iría, pero es un oso negro… así que, si no lo molesto, él no me molestará a mí”. Su esposo, Bob, también demostró estar relajado ante la inesperada compañía.

Un oso 'amigable' y una familia que lo cuida

Bob fue entrevistado por 'KCBS', donde reafirmó su tranquilidad: “No le tenemos miedo en absoluto. Es solo un oso viejo que necesitaba un lugar para convertirlo en una guarida”. 

Las imágenes del animal, capturadas por las cámaras instaladas por el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California, fueron compartidas en un video por Inside Edition, dando aún más visibilidad al curioso caso.

A pesar de la sorpresa, los Nesler han expresado su deseo de proteger al oso. “El Departamento de Pesca y Vida Silvestre prácticamente se ha hecho cargo de no lastimar al oso… nos aseguramos de eso”, señaló Bob. 

La pareja ha sido clara en su rechazo a cualquier acción que pudiera dañar al animal, afirmando que cuando la Policía sugirió asustarlo disparándole bolas de pimienta, Bob se opuso rotundamente: “No, no, no, no, no, no, no. No queremos lastimarlo de ninguna manera”.

Una convivencia pacífica

La pareja, que ha vivido en su casa durante 27 años, está acostumbrada a la presencia de osos en el área, pero es la primera vez que uno de ellos decide convivir tan de cerca con ellos. El animal, al que decidieron llamar Junior, parece seguir una rutina nocturna, ya que, según la pareja, abandona la casa todas las noches alrededor de las 10:00 pm.

CÉSAR QUISPE

El Comercio (Perú) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de El Comercio (GDA), y contó con la revisión de un periodista y un editor.

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