Ni arándano ni açaí: la fruta patagónica que ‘blinda’ la piel contra el envejecimiento y es rica en vitaminas A y C

La baya de maqui, o Aristotelia chilensis, es una fruta originaria de las regiones chilena y argentina, reconocida por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. 

Este fruto, propio de la Patagonia y altamente valorado por los pueblos indígenas, crece en ambientes diversos, desde el centro árido hasta el húmedo sur de Argentina, coexistiendo con otras frutas como la mora y la frambuesa. 

Su alto contenido de antocianinas lo convierte en un aliado contra el envejecimiento y en un recurso cultural y nutricional de gran importancia para el pueblo Mapuche, quienes lo consideran sagrado y lo emplean en rituales y ceremonias.

Un superalimento con un poderoso efecto antioxidante

Además de sus beneficios para la piel, la baya de maqui puede consumirse en diferentes formatos, como en polvo liofilizado para añadir a yogures, avenas o granolas, o incluso en postres y bebidas. Sin embargo, para quienes deseen incorporarla en su dieta, es aconsejable buscar orientación profesional. 

Este arbusto puede alcanzar hasta cinco metros de altura, y sus hojas vibrantes se usan en ensaladas. “Teniendo en cuenta que cada vez hay más demanda, desde el INTA nos queremos anticipar a ese escenario y preservar este recurso natural de nuestros bosques patagónicos”, comentó Cecilia Roldán, investigadora del INTA Bariloche, al sitio INTA Informa.

Pese a su potencial, en Argentina esta fruta sigue siendo poco conocida y su oferta limitada. En cambio, en Chile, el maqui ha ganado relevancia en la industria de alimentos y cosmética, aprovechando sus propiedades en jugos, dulces y productos de belleza. 

Baya de maqui: beneficios

Considerada un superalimento por sus excepcionales propiedades, la baya de maqui no solo es una fuente natural de antioxidantes, sino que ofrece una variedad de beneficios para la salud, estos son: 

1. ‘Blinda’ la piel

La nutricionista Silvana Ottaviano explica que las antocianinas del maqui ayudan a proteger la piel del daño causado por los rayos UV, la inflamación y el estrés oxidativo. 

Un estudio en la revista Molecules respalda estas afirmaciones, concluyendo que este fruto puede ofrecer efectos antioxidantes y fotoprotectores, aunque se requieren más investigaciones para confirmar su impacto a largo plazo. “Aunque pueden mejorar la salud cutánea, se necesitan más investigaciones que respalden su impacto”, se indica en el estudio.

2. Alto poder antioxidante

Según Anakarla Romera, cofundadora de Maqui Antioxidante From Patagonia, el maqui es un “tesoro” con perfiles fitoquímicos únicos, y uno de los alimentos con mayor capacidad antioxidante del mundo, debido a su valor ORAC, que mide la capacidad de neutralizar radicales libres. 

Romera destaca que el maqui tiene una “alta concentración de polifenoles y antocianinas”, compuestos que protegen las células del daño oxidativo, promoviendo el bienestar general.

3. Protección para el corazón

Los compuestos de esta fruta también favorecen la salud cardiovascular. Un estudio sobre salud realizado en 93,600 mujeres muestra que las dietas ricas en antocianinas, presentes en el maqui, reducen el riesgo de ataques cardíacos en un 32 por ciento.

Además, Ottaviano señala que el maqui puede prevenir la oxidación del colesterol LDL, disminuyendo el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares. En otro estudio, se asocia el consumo de antocianinas con una reducción del 12% en el riesgo de hipertensión arterial, subrayando su relevancia para la salud del corazón.

VICTORIA VERA ZICCARDI

La Nación (Argentina) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de La Nación, y contó con la revisión de un periodista y un editor.