Todo Estados Unidos está expectante ante la llegada del 20 de enero de 2025, día en que Donald Trump volverá a ser presidente del país por segunda vez, tras haber vencido a Kamala Harris en las elecciones. En este contexto, Texas expandió una medida contra la inmigración, desafiando a la saliente administración de Joe Biden.
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"Pese a los intentos de la administración de Biden-Harris de eliminar nuestros esfuerzos de seguridad fronteriza", escribió el gobernador texano Greg Abbott en su perfil de X, "las boyas están aquí para quedarse".
Texas placed more buoys in the Rio Grande River this morning.
Despite the Biden-Harris Administration’s attempts to shut down our border security efforts, the buoys are here to stay.
We won't back down from our mission to deter & repel illegal immigration. pic.twitter.com/mpfdZhTyO2
El gobernador Abbott dijo que Texas no retrocederá en la misión de disuadir y repeler la inmigración ilegal, en la publicación que acompañó con un video de los trabajadores instalando el sistema de boyas en el río Grande.
Pero esto no es todo, además de ampliar el sistema de boyas, el gobernador Abbott le ofreció un rancho con terreno lindante a la administración Trump para que se construya un nuevo centro de detención de migrantes cerca de la frontera estatal con México.
Acusan a Texas de implementar medidas "crueles" contra los migrantes
En el informe de Telemundo, se entrevistó a personas que están en contra de esta clase de medidas contra los migrantes como la de instalar boyas en medio del río Grande, ya que esto puede atentar directamente contra la vida de las personas, más allá de su condición.
Tal es el caso de Juan José Gutiérrez, director de la Coalición Derechos Plenos para MIgrantes, quien dijo que las boyas son puro "circo político", y que son completamente crueles. Por su parte, pastor Julio Vásquez, de Red Fronteriza, dijo que estas boyas ya han causado muertes y que representan un peligro para la vida de las personas.