Gladys Del Cid lleva más de siete años exigiendo una respuesta del sistema judicial y de Salud tras lo ocurrido con su hija, Ivonne Peña.
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La joven, quien tenía apenas 15 años cuando ingresó al Hospital San Juan de Dios en Santa Ana, El Salvador, quedó en estado vegetativo luego de un procedimiento médico que, según la madre, estuvo lleno de irregularidades. “Siento que el sistema me ha defraudado”, expresó Gladys, quien sigue esperando que los daños ocasionados sean resarcidos.
El caso ocurrió el 26 de junio de 2017, pocos días después de que Ivonne celebrara su cumpleaños. La joven había acudido a una clínica privada por fiebre y dolor abdominal, pero fue remitida al hospital público.
Gladys recuerda que allí diagnosticaron a su hija con apendicitis, aunque señala que ni siquiera tiene claridad sobre el procedimiento exacto que realizaron, ya que los médicos nunca explicaron lo sucedido. “Nos atendieron horas después y me dijeron que le harían un examen, pero cuando pregunté por los resultados, ya la estaban preparando para cirugía”, narró.
Un procedimiento lleno de dudas
La intervención ocurrió pasada la medianoche. Según Gladys, alrededor de las 3 de la madrugada, los médicos le informaron que Ivonne había sufrido un paro cardíaco y una reacción alérgica durante la operación. “De la impresión me desmayé. Desde ese momento, mi hija quedó entubada y con parálisis cerebral”, relató. En agosto del mismo año, los médicos la desconectaron y confirmaron su estado vegetativo.
Antes de esta tragedia, Ivonne era una joven llena de sueños y talento. Estudiaba en el Centro Escolar Colonia San Mauricio y planeaba cursar bachillerato en el Instituto Nacional de Santa Ana. “Ella participó en el programa Diputado por un día. Mi hija era muy inteligente, pero le truncaron sus sueños”, expresó Gladys. Ivonne es la segunda de tres hermanos y, debido a la situación, su hermana mayor ha asumido el cuidado del menor, ya que su padre los abandonó recientemente.
Un proceso judicial que se dilata
La lucha legal de Gladys ha sido ardua. El caso, que se encuentra en fase de instrucción en el Juzgado Segundo de Instrucción de Santa Ana, enfrenta serios retrasos. La audiencia preliminar contra los médicos Jorge Stalin Fajardo Morán, José Manuel Hernández, Julio Ernesto Grijalva, Saúl Arturo Escobar y Oscar Armando Romero (fallecido), ha sido suspendida siete veces. La acusación señala que los residentes médicos que atendieron a Ivonne no contaron con la supervisión adecuada, como exige la Ley de Educación Superior. “Tienen que ser supervisados por una persona delegada por el hospital o la Universidad, pero eso no ocurrió”, explicó el querellante.
Actualmente, Gladys subsiste gracias al apoyo de familiares y personas solidarias, ya que el cuidado de Ivonne le impide trabajar. Aunque el hospital asume los costos médicos de la joven, la madre debe cubrir otros gastos esenciales como pañales y toallas húmedas. A pesar de todo, exige que los culpables asuman su responsabilidad e indemnicen a su hija. “Mi hija merece justicia”, afirmó con determinación.
Por su parte, la Fiscalía General de la República no ha brindado detalles sobre el caso, alegando que se encuentra bajo reserva. La dirección del hospital tampoco ha emitido declaraciones. Mientras tanto, Gladys continúa cuidando a su hija en el hospital y manteniendo viva la esperanza de que algún día se haga justicia.
La Prensa Gráfica (El Salvador) / GDA.
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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de La Prensa Gráfica, y contó con la revisión de un periodista y un editor.