Los republicanos controlarán el Senado y Cámara de Estados Unidos, según proyecciones de medios

Los republicanos revalidaron su mayoría en la Cámara de Representantes de Estados Unidos -conformada por 435 escaños- en las elecciones legislativas de la semana pasada, con lo que se aseguraron el control total del Congreso, según proyectaron este miércoles las cadenas CNN y NBC.

Si bien la prometedora victoria republicana en el legislativo norteamericano ya era algo que se veía venir desde el día de las elecciones, la apretada disputa contra los demócratas en algunas regiones impedía proyectar que el partido que emcabeza Trump se iba a quedar con las mayorías en Senado y Cámara.

Las mayorías legislativas le darán a Donald Trump un camino directo para aprobar más rápidamente sus proyectos. Esto, sumado a que la Corte Suprema de Justicia también tiene las mayorías conservadoras.

Vamos a hacer todo lo posible para procesar su nombramiento rápidamente y que se instalen en sus puestos para que puedan implementar su agenda

Además, el recién elegido líder de los republicanos en el Senado, John Thune, aseguró este miércoles que espera poder "cooperar" con los demócratas para ratificar a los nominados propuestos por Trump para su futuro gabinete.

"Vamos a hacer todo lo posible para procesar su nombramiento rápidamente y que se instalen en sus puestos para que puedan implementar su agenda", afirmó Thune en su primera rueda de prensa tras ser elegido.

Asimismo, adelantó que el proceso de confirmación "será el habitual" y que celebraran audiencias de conformación para las que piden a los demócratas "cooperación" para que estas personas se instalen en sus nuevos puesto.

Thune pareció descartar, por ahora, la petición que hizo Trump el domingo, cuando exhortó a los republicanos del Senado a que le permitieran nombrar a funcionarios clave del gabinete sin tener que pasar por un voto de confirmación de la Cámara.

Pese a que la Constitución establece que el Senado debe ratificar los cargos, hay una cláusula que permite eludir ese voto cuando la Cámara Alta acumula varios días de receso.

El presidente electo no debería afrontar muchas dificultades para nombrar a su gabinete mediante el proceso regular, dado que los republicanos ostentan una mayoría en el Senado de 52 escaños, pero teme que algún legislador de su partido se oponga a algún nombramiento polémico o que los demócratas usen maniobras para dilatar los procedimientos.

"Las votaciones pueden demorar dos años, o más. Esto es lo que ellos (los demócratas) hicieron hace cuatro años, y no podemos permitir que pase otra vez", declaró Trump en redes sociales.