El presidente Gustavo Petro anunció la semana anterior, en medio de la presentación de parte de su nuevo gabinete, que todavía faltaban algunos cambios por hacer.
"En términos generales, acá hay parte del que será el nuevo gabinete. Aún no se han cambiado todas y todos los ministros que vamos a buscar", señaló el mandatario.
Parte del nuevo gabinete del presidente Gustavo Petro Foto:Presidencia
El jueves 27 de febrero, en el centro de Bogotá, presentó en sociedad a su nuevo equipo de cara al inicio de la recta final de su gobierno, que había sido anunciado en los días previos. Asistieron congresistas y militantes, principalmente La prensa no tuvo acceso.
Armando Benedetti (Interior), Pedro Sánchez (Defensa), Edwin Palma (Minas), Lena Estrada (Ambiente), Yannai Kadamani (Culturas), Patricia Duque (Deporte), Carlos Rosero (Igualdad) y Angie Lizeth Rodríguez (Dapre) fueron los presentados.
Pero esos no han sido los únicos cambios. El sábado anunció, vía X, que Julián Molina será el nuevo ministro de las TIC. Además, Antonio Sanguino asumió como ministro del Trabajo, María Fernanda Rojas como ministra de Transporte y Laura Sarabia como canciller.
Julián Ruperto Molina, nuevo ministro de las TIC. Foto:Supersubsidio
Así va la conformación del nuevo gabinete
La idea del presidente Gustavo Petro es tener un gabinete con representación de sectores claves que le permitan sacar adelante su agenda legislativa, hoy estancada en el Congreso.
Por tal razón, se entregaron varios ministerios a partidos políticos y a sectores de partidos. Por ejemplo, el oficialismo de Alianza Verde se quedó con Trabajo y Transporte. A la disidencia de Cámara del conservatismo se le otorgó, nuevamente, el Ministerio del Deporte. ‘La U’ se quedó, una vez más, con el Ministerio de las TIC, que ha pertenecido a ese partido desde el inicio del gobierno. Incluso, los sindicalistas, claves para ir a las calles, tienen representación con Palma.
Pero en ese organigrama inicial está por fuera la representación liberal. Si bien el expresidente César Gaviria Trujillo, director del Partido Liberal, le cerró la puerta a una posible participación en el Gobierno, la disidencia de la colectividad en Cámara sí está interesada en tener un ministerio y así seguir apoyando las reformas.
César Gaviria, expresidente de Colombia y jefe del Partido Liberal. Foto:Héctor Fabio Zamora. EL TIEMPO.
Es ahí donde todavía faltan unas cartas por jugar. Los liberales de Cámara, casi todos progobierno, han movido durante las últimas semanas la hoja de vida del médico José Luis Correa, exrepresentante de ese partido de origen caldense. Correa era uno de los ahijados políticos del exsenador Mario Castaño, condenado por corrupción y quien murió en prisión.
El grupo del cuestionado exsenador Julián Bedoya también se ha movido y ha pedido un ministerio. Una de las principales voces de ese movimiento es María Eugenia Lopera, representante paisa que hoy es ponente de la reforma de la salud y es recordada por haber salvado el primer proyecto cuando iniciaba su curso en la Comisión VII de la Cámara de Representantes.
Durante los últimos días ha tomado fuerza la posible salida de Luis Carlos Reyes del Ministerio de Comercio. No se descarta tampoco que haya un cambio en el Ministerio de Vivienda, una cartera que siempre ha gustado al liberalismo.
Luis Carlos Reyes. Foto:Pablo Salgado / Revista BOCAS
Otros cambios pendientes en el gabinete del presidente Gustavo Petro
La salida de Gustavo Bolívar del Departamento de Prosperidad Social es inminente. Falta solo acordar la fecha, pues el exsenador está listo para buscar el aval de lo que hoy es el Pacto Histórico de cara a las presidenciales del 2026.
Ese cargo quedaría en manos de una persona cercana al petrismo y al mandatario, tal y como ha sido desde que se inició el gobierno.
Falta también conocer el destino de la Dirección Nacional de Planeación tras la renuncia de Alexander López. En un momento tomó fuerza el nombre de Susana Muhamad, pero esto habría quedado descartado.
Presidente Gustavo Petro presenta a su nuevo gabinete Foto:
Es una incógnita el futuro del exsenador del Polo, quien está distanciado del Gobierno y del petrismo, tanto así que no asistió a la cumbre de la izquierda de la semana anterior en la casa de Roy Barreras.
Por lo pronto, las reformas siguen estancadas y los votos liberales en Cámara serán necesarios para su aprobación. En Senado, el juego será a otro precio y todavía Benedetti no ha mostrado cuáles serían sus cartas.
MATEO GARCÍA
Subeditor de Política