Unas filas de sillas perfectamente ordenadas en la platea del escenario del Movistar Arena de Bogotá invitaban a sentarse y a degustar un concierto cargado de hard rock y algo de nostalgia. Pero esos elementos para darle un cierto toque solemne y de comodidad a quienes quisieron acompañar en su concierto a la banda Foreigner, fueron solo accesorios, para descansar los brazos mientras se cantaba a viva voz y de pie la avalancha de clásicos y una descarga roquera que no es inusual en el grupo, pero que en vivo explota de manera brutal.
El grupo, creador de éxitos y de riffs fulminantes apareció para cumplir su cita con la capital colombiana mientras las luces se apagaban para darle el protagonismo a una nueva batalla musical a unos Foreigner que siguen girando y llevando ese halo de renovación y nostalgia en un tour latinoamericano en el que contaron con la aparición de su vocalista original Lou Gramm. Muchos estaban presentes en esa noche fría bogotana del 5 de mayo para ver al artífice de esa poderosa máquina roquera, que está cerrando su ciclo y querían recordar un poco de esa historia de casi medio siglo escuchando a un Gramm en unos cuantos clásicos. Ellos recibieron una bonita recompensa.
Un inicio brutal
Pero se llevaron una grata sorpresa al primero saludar entre gritos y aplausos al cantante y guitarrista Luis Maldonado, que con una voz limpia, poderosa y realmente magnética se encargó de revivir clásicos como ‘Double Vision’, ‘Head Games’ y ‘Cold as Ice’, está última una de las más coreadas de la noche. Sin concesiones, ni pausas, el grupo se metió al bolsillo a sus fanáticos. Luego vino una tanda impresionante al recordar en vivo la romántica y pegajosa 'Waiting for a Girl Like You'; 'Blue Morning, Blue Day,' así como 'That Was Yesterday', que fue, sin exagerar, épica.
La gente aplaudió, levantaba la mirada al cielo y apretaba la bandana con el nombre del grupo, ante el golpe de un teclado embriagador; el roquerismo riff de guitarra de Dirty White Boy y Feels Like the First Time, solo por nombrar algunas.
La banda dio un recital con un hard rock poderoso. Foto:Andrea Moreno. EL TIEMPO
La emoción fue creciendo con la brutal 'Urgent', que a falta de su inolvidable solo de saxofón, dio protagonismo a los teclados y la guitarra. Miles de voces gritaron: ‘urgent, emergency’, esperando que nadie llegara a salvarlos o sacarlos de ese momento, de esa experiencia, que les estaba brindando Foreigner. Michael Bluestein tuvo tiempo para deleitar con su talento en los teclados, al igual que Chris Frazier en la batería.
Lou Gramm impresionó por su entrega en el escenario. Foto:Andrea Moreno. EL TIEMPO
Un paréntesis divertido antes del regreso al escenario de Maldonado, quien le dio la bienvenida a la leyenda Lou Gramm. Juke Box Hero apareció para apoyar la histeria en la audiencia al ver a uno de los grandes del rock tan cerca.
Gramm, quien ha lidiado con batallas personales, de salud y con el paso del tiempo le dio todo en esa canción, al igual que con 'Long, Long Way From Home', acompañado por un leal Luis Maldonado que incitaba a todos a no dejar de aplaudir y vitorear al cantante de otro clasico de 1977: Long, Long Way From Home.
Maldonado estaba feliz de cantar en Bogotá. Foto:Andrea Moreno. EL TIEMPO
El reencuentro con un hit
La adrenalina estaba en su pico más alto, el volumen atronaba un poco y era hora de dar un pequeño respiro con una canción que, como lo recalcó el cantante de esta gira “fue por todo el mundo (sic) y es un honor tocarla en tu país”.
Era nada más y nada menos que I Want to Know What Love Is, una balada poderosa que se convirtió en un hit indiscutible y una de las canciones más sentidas y hermosas de Foreigner. El suelo sintió la vibración de los asistentes al concierto, que iluminaron el Movistar Arena con sus teléfonos celulares y tomaron aire para cantar con Maldonado y Gramm este himno que palpita sin parar desde 1984 y rinde un homenaje al amor. “Queremos que canten esta canción con nosotros, hacerlo juntos…”, agregó el cantante mirando a Gramm.
“Ahora tengo que pensar, pensarlo todo con más tiempo, espero al menos encontrar entre líneas lo que siento”, interpretó en español Maldonado emocionado, antes de dar paso a la voz de una leyenda que la siguió en inglés, mientras al frente había lágrimas y esa sensación electrizante de lo que muchos llaman la piel de gallina. No era para menos.
Maldonado, Gramm y Jeff Pilson en la despedida del recital. Foto:Andrea Moreno. EL TIEMPO
Luego vino el cierre con Hot Blonded, tras una jornada intensa de clásicos y recuerdos. Cansado de correr de un lado a otro Jeff Pilson (recordado por ser parte de Dokken y Dio), lanzó su pick de bajo y sonrió antes de acercarse a toda la banda y decir adiós ante un público emocionado que, cabe decir, le hizo falta otro de los hits de Foreigner: Say you Will, pero con todo y eso, fue un recital bonito, emotivo y que también demostró el poderío de una banda que en 2024 llegó al Salón de la Fama del Rock and Roll y que ahora se lleva el grandioso momento de haber compartido con un público feliz. En realidad, Foreigner supo lo que es el amor en Colombia.
ANDRÉS HOYOS VARGAS
EL TIEMPO