Joven jugó intercambio de regalos con su familia y se llevó el premio que nadie quería: el obsequio la volvió millonaria

Lo que comenzó como un simple juego navideño en Indiana, Estados Unidos, terminó cambiando la vida de Emily Hickox, una joven de 25 años. 

Participar en un intercambio de regalos con su familia no solo trajo diversión, sino que también la convirtió en ganadora de 500 mil dólares (aproximadamente más de $ 2.157 millones de pesos colombianos), una cantidad que nunca imaginó obtener en una noche de celebraciones.

Un regalo inesperado en un juego familiar

Emily y su familia organizaron para Navidad una versión del juego ‘White Elephant’, una actividad en la que los participantes intercambian obsequios graciosos o de poco valor, respetando un presupuesto establecido. 

Entre los regalos estaba un boleto del juego instantáneo Detroit Lions de la Lotería de Michigan, comprado por un primo de Emily. Este boleto inicialmente terminó en manos de su padre, quien no se mostró muy satisfecho con el regalo.

Como parte de la dinámica, el padre de Emily decidió cambiar el boleto con ella, optando por quedarse con una linterna que ella había recibido. Sin saberlo, ese intercambio sería el inicio de una historia memorable.

El momento en que descubrió el premio

Emily relató lo que ocurrió después: “Raspé el boleto en Navidad, que también es mi cumpleaños, y pensé que había ganado $ 50 mil dólares (alrededor de $ 215 millones de pesos colombianos). Descargué la aplicación de la Lotería de Michigan y creé una cuenta para revisar el boleto en el escáner de la aplicación. Esperaba ver $ 50,000, así que cuando vi el cero adicional, ¡me quedé sin palabras! ¡No podía comprender que acababa de ganar $ 500,000!”.

El boleto ganador había sido adquirido en una tienda Meijer ubicada en 2799 10 Mile Road, en Rockford. Emily visitó ese mismo lugar para reclamar su premio y confirmar su suerte.

Planes para el dinero ganado

Con el premio en sus manos, Emily aseguró que sus planes incluyen comprarse un auto nuevo y realizar inversiones. Además, subrayó que el dinero no será únicamente para ella, pues compartirá parte de la ganancia con su primo, quien compró el boleto, y con sus padres, quienes participaron en el intercambio.

Su jefe le pidió un turno extra y su sacrificio la llevó a ganar un millón de dólares

Rebeca González, una trabajadora de supermercado en California, jamás imaginó que aceptar trabajar horas adicionales en un fin de semana festivo cambiaría su destino. 

Lo que parecía ser un simple gesto de responsabilidad laboral terminó convirtiéndose en una oportunidad única que transformó su vida para siempre.

Una decisión cotidiana que lo cambió todo

Durante el concurrido fin de semana del Labor Day, su jefe le pidió cubrir un turno adicional debido a la falta de personal. Aunque prefería pasar ese tiempo con su familia, Rebeca decidió ayudar. La jornada fue tan intensa que ni siquiera pudo realizar una de sus rutinas habituales: comprar un raspadito de lotería durante el almuerzo. Sin embargo, antes de finalizar su turno, decidió adquirir uno casi por casualidad.

“Solo se lo conté a una persona en el trabajo, y fue al gerente, que quería que me quedara hasta tarde en un día festivo. No lo podía creer”, recordó González en una entrevista con The Times. Ese boleto se convirtió en el ganador de un millón de dólares (aproximadamente más de $4.315 millones de pesos colombianos), algo que la dejó sin palabras.

Un pequeño detalle que marcó la diferencia

Al salir del supermercado, recordó que tenía un billete de 10 dólares sobrante de una compra que había realizado para su hija. Fue ese dinero el que usó para adquirir el boleto de lotería que cambiaría su vida. "Quería, obviamente, estar en casa con mi familia porque planeamos hacer una barbacoa", contó Rebeca a la Lotería de California, refiriéndose a sus planes iniciales para ese día.

El momento del descubrimiento fue inolvidable. Al escanear el boleto en una licorería cercana, quedó en shock al confirmar que era millonaria. El equipo de la Lotería de California incluso registró en video su reacción: saltos de alegría y lágrimas de felicidad. “Todos lloraron de la felicidad”, expresó al recordar cómo su familia recibió la noticia.

Un futuro lleno de posibilidades

La vida de Rebeca antes del premio no era fácil. Trabajaba jornadas completas, cuidaba de sus hijos y tomaba clases nocturnas con la meta de convertirse en radióloga. Ahora, su vida ha dado un giro inesperado. 

Con el dinero, su familia adquirió una casa con cinco habitaciones, liquidó gran parte de sus deudas y ella dejó su empleo para dedicarse de lleno a sus estudios.

Hay una nueva ganadora de la lotería gracias a los números de Diomedes Díaz | El Tiempo

CÉSAR QUISPE ALCÓCER

El Comercio (Perú) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de El Comercio, y contó con la revisión de un periodista y un editor.