Mientras que el compromiso de los 191 países que firmaron el Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (TNP) es enriquecer uranio a un límite del 3,67 por ciento, Irán almacena unos 400 kilos de este elemento químico a un nivel de pureza del 60 por ciento, lo que lo pone muy cerca de lo necesario para fabricar bombas atómicas (90 por ciento).
Planta de enriquecimiento de uranio en Irán. Foto:Efe
Así las cosas, Irán "no está lejos" de poseer una bomba nuclear, según advirtió el jefe del organismo de control nuclear de la ONU, Rafael Grossi, en abril. "Es como un rompecabezas. Tienen las piezas y un día podrán juntarlas", agregó en una entrevista al diario Le Monde.
¿Qué le falta para llegar al 90 por ciento?
Según un reporte del Institute for Science and International Security, un centro de referencia en el análisis de programas nucleares, el denominado "breakout time" de Irán, es decir, el tiempo necesario para fabricar un arma nuclear, se ha reducido a cero.
De hecho, el Instituto de Ciencia y Seguridad Internacional (Isis), liderado por David Albright, un antiguo inspector del OIEA, estimó en un informe a principios de junio que Irán necesitaría apenas dos o tres días para enriquecer los 25 kilos de uranio al 90 por ciento necesarios para una bomba nuclear.
A este ritmo, el país persa podría llegar a tener 15 bombas en apenas dos meses, advirtió el ISIS en su informe del 9 de junio.
Una foto de satélite muestra las instalaciones nucleares iraníes de Natanz, al sur de Teherán. Foto:AFP
Bajo estas cifras, “dadas las posibles implicaciones de proliferación, la agencia no puede ignorar (esta situación)”, apuntó el titular del OIEA ante la junta directiva del Organismo que votó el jueves a favor de censurar, por primera vez en 20 años, a Irán por no cumplir con las obligaciones internacionales de evitar el desarrollo de un arma nuclear.
Una medida que podría poner en marcha un esfuerzo internacional para restablecer las sanciones económicas a Irán a finales de este año.
En medio de estos avances diplomáticos y de las negociaciones directas entre Irán y Estados Unidos para el desarme nuclear total del país persa a cambio de levantar las sanciones, Israel comenzó en la madrugada del viernes una serie de ataques contra instalaciones militares y nucleares en Irán, que se repitieron a lo largo del día en el lanzamiento de la denominada “Operación León Naciente” que, según declaró Israel, podría extenderse por 14 días o los necesarios para acabar con la amenaza.
Esta nueva estrategia busca eliminar posibles agentes que pongan en marcha el programa nuclear, así como debilitar la toma de decisiones del régimen iraní
Manuel Camilo GonzálezProfesor de Relaciones Internacionales
Entre los objetivos estuvo la principal planta de enriquecimiento de uranio iraní, Natanz; la segunda planta más importante cerca del área de Fordó, situada a 100 kilómetros al sur de la capital; y la instalación nuclear de Isfahán, a unos 350 kilómetros al sureste de Teherán.
Así las cosas, "el ataque de Israel a instalaciones nucleares iraníes definitivamente dinamita todas las líneas rojas en Medio Oriente", comenta Alexander Montero, político de la Embajada de Palestina en Colombia y CEO de Strategy & Global Risk.
Para Manuel Camilo González, profesor de Relaciones Internacionales de las universidades Javeriana y San Buenaventura, la operación del Rising Lion podría catalogarse como una "evolución de Begin". Es decir, "los ataques no solo se dirigen a vulnerar infraestructura, sino personal como los científicos u oficiales al mando de estos programas. Por tanto, esta nueva estrategia también busca eliminar posibles agentes que pongan en marcha ese programa, así como debilitar la toma de decisiones del régimen iraní para prevenir ataques a Israel", explica.
Instalación nuclear de Natanz, en el sur de Teherán, Irán. Foto:AFP
Por ello, "esta situación hay que manejarla con mucho cuidado y con muchísima responsabilidad", agrega Montero. "Porque puede abrir la puerta para muchísimas más guerras en el sistema internacional", advierte el analista.
Cabe recordar que la República Islámica de Irán es un patrocinador clave de la milicia islamista chií libanesa y del partido político Hezbolá. También, apoya a los rebeldes hutíes de Yemen, a Hamás en Gaza, así como grupos armados chiitas en Irak.
En caso de una escalada, ¿quién tiene la ventaja?
En octubre de 2024, el ejército israelí atacó varios sitios de fabricación de misiles iraníes y sistemas de defensa aérea en lo que parecía ser una respuesta altamente calculada que evitó la infraestructura energética crítica, como los campos petroleros y las instalaciones nucleares.
Al igual que en aquel momento, los ataques de este viernes generan dudas respecto a cómo Irán va a responder y cuáles serían los posibles efectos.
Por ello, el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS) realizó un estudio que compara la potencia de fuego de los ejércitos de Israel e Irán.
De acuerdo con la investigación, a primera vista, el Estado hebreo tendría una ventaja en ataques aéreos de precisión, pues cuenta con más aviones militares listos para el combate que Teherán.
Misiles de Irán impactan en Israel. Foto:Archivos particulares de redes sociales
Las cifras del IISS muestran que Israel tiene 340 aeronaves, entre aviones F-15 con alcance de ataque de larga distancia, F-35 (aviones "furtivos" de alta tecnología que pueden evadir el radar) y helicópteros de ataque rápido.
Teherán al día de hoy no tiene una capacidad de respuesta doméstica ni regional creíble para vulnerar a Israel
Manuel Camilo GonzálezProfesor de Relaciones Internacionales
Mientras, Irán cuenta con 320 aviones con capacidad de combate. Algunos se remontan a la década de 1960 e incluyen F-4, F-5 y F-14 (este último es el avión que se hizo famoso en la película Top Gun de 1986).
La ventaja de Teherán sería su programa de misiles, el más grande y diverso de Medio Oriente.
El IISS explica que las tropas iraníes están dotadas con misiles de crucero, misiles balísticos y vehículos aéreos no tripulados (UAV, por sus siglas en inglés). Este arsenal “está destinado no solo a la disuasión, sino también a la batalla”, explica el documento.
El informe agrega que las fuerzas iraníes tienen aproximadamente unos 20 tipos distintos de misiles, con una capacidad de alcance de hasta unos 2.000 kilómetros de distancia. Por su parte, los drones tienen una capacidad de autonomía de unos 1.900 y 2.400 kilómetros.
Quizás los misiles más notables son los Qiam-1, los Emad y los misiles balísticos de corto alcance Fateh.
En este escenario, Israel tiene la Cúpula de Hierro, el sistema de defensa más avanzado del mundo, que costó más de 3 mil millones de dólares. Aunque es posible de penetrar.
La capacidad misilística de Irán es una parte clave de su poder militar. Foto:Getty Images
Muy seguramente vamos a tener una respuesta iraní como la que ya se tuvo con ataques 'quirúrgicos'
Margarita cadavidExperta en Medio Oriente
El ataque del viernes, según Israel, fue "un ataque preventivo" aun sabiendo que "Teherán al día de hoy no tiene una capacidad de respuesta doméstica ni regional creíble para vulnerar a Israel", asegura González. "Por tanto, resulta poco probable un gran despliegue de Irán salvo por sus misiles balísticos y drones que han sido lanzados contra territorio israelí, pero han sido interceptados por la Cúpula de Hierro en otras ocasiones", agrega el internacionalista.
Margarita Cadavid, docente de estudios de Medio Oriente, advierte que Irán no va a dejar sin respuesta este tipo de ataques. "Es difícil pronosticarlo, pero teniendo en cuenta lo que ha pasado hasta el momento, muy seguramente vamos a tener una respuesta iraní como la que ya se tuvo con ataques 'quirúrgicos', sin desfasarse en esa respuesta y sin llegar a generar un escenario donde la confrontación pueda pasar a mayores", analiza.
El programa nuclear de Israel
En cuanto al arsenal nuclear existe una diferencia crucial: Israel ya posee armas nucleares, mientras que Irán, de momento, no.
El Director General del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi. Foto:AFP
"Es irónico que el atacante, en este caso Israel, tenga un programa nuclear que es mucho más clandestino y mucho más ilegal que el programa nuclear iraní", comenta Montero.
Israel mantiene desde hace décadas una política de ambigüedad nuclear y nunca ha confirmado oficialmente tener armamento atómico. No obstante, organismos especializados estiman que dispone de alrededor de 80 a 90 ojivas nucleares en su arsenal.
Según el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (Sipri), este arsenal incluye bombas de caída libre para sus aviones y ojivas montadas en misiles balísticos de alcance medio Jericó II/III, capaces de alcanzar objetivos a miles de kilómetros.
De hecho, Israel es considerado el único Estado nuclear extraoficial de Medio Oriente–no firmado del TNP– y nunca ha aceptado una verificación de una agencia nuclear internacional, sea de algún socio o sea de el OIEA.
Israel ataca Irán, incluyendo instalaciones nucleares Foto: