Intentó cruzar con estas bolsas de basura, pero CBP descubrió que era algo más que eso

El tráfico de drogas es una problemática de atención constante para las autoridades de Estados Unidos. En este sentido, un reciente incidente en el sector de San Diego dejó en evidencia la dedicación de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus sigla en inglés) para interceptar cargamentos ilegales. 

Según consignó la entidad en su página web oficial, el jueves 27 de febrero, un operativo rutinario a lo largo de la carretera interestatal 5 culminó en una sorprendente incautación de cocaína. De esta manera, quedó en evidencia cómo los traficantes intentan ocultar drogas de manera creativa.

De acuerdo con lo informado en el portal citado, a las 5:45 p. m., agentes de la estación de San Clemente detuvieron un sedán sospechoso que viajaba en dirección norte por la Interestatal 5 cerca de Camp Pendleton. 

Tras una conversación inicial con el conductor, decidieron solicitar la intervención de una unidad K-9, la cual se especializa en la detección de narcóticos. Allí, el perro alertó sobre la presencia de drogas, por lo cual, posteriormente, se registró el maletero del vehículo.

Lo que parecía ser un control rutinario de tráfico se transformó en un hallazgo que sorprendió a todos. ¿El motivo? Dentro del maletero, los agentes encontraron nada más y nada menos que dos bolsas de basura blancas, las cuales contenían paquetes envueltos en celofán. 

Luego de realizar las pruebas pertinentes, finalmente se confirmó que los paquetes contenían cocaína. En total, los agentes incautaron 47,51 libras de este narcótico. Cabe destacar que el valor estimado es de casi US$810.000.

Los métodos y escondites descubiertos por la CBP

Es importante mencionar que el uso de bolsas de basura para ocultar sustancias ilícitas no es una novedad. Sin embargo, en este caso, los traficantes pensaron que las bolsas de plástico pasaban desapercibidas como un método de contrabando. 

A pesar de esto, la vigilancia de la entidad, acostumbrada a estos hechos, pasó a ser efectiva. Sobre el estado del conductor del vehículo y su pasajero, la agencia aclaró que fueron detenidos y enfrentan cargos de tráfico de estupefacientes. 

Por su parte, el vehículo fue confiscado por la Patrulla Fronteriza. La Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), asumió la custodia de la sustancia ilegal, mientras los arrestados serán procesados de acuerdo con las leyes federales.

Respecto del hecho en cuestión, el agente jefe interino de la Patrulla Fronteriza del Sector de San Diego, Jeffrey D. Stalnaker, habló sobre la importancia de este tipo de operativos, y destacó que los agentes trabajan las 24 horas del día para proteger al pueblo estadounidense. 

"Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para detener a quienes intentan causarnos daño y procesarlos con todo el peso de la ley", concluyó.