Flor de Lava ilumina a la industria musical con su Festival de Fuego 2024

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“Cuando uno se junta con mujeres el alma vuelve a casa”, dice Sabi Satizábal, cantante e integrante de Flor de Lava, una juntanza de mujeres que hace música y eventos para sanarse en colectivo y visibilizarse unas a otras. Son seis artistas con su propio proyecto musical, pero que en 2022 se unieron como “amigas, cómplices y compañeras de camino”.

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Se reunieron para hacer música juntas y realizar acciones para ayudar a otras mujeres en la industria. El velo se cayó lo arranqué de mis convicciones / hoy pienso hacer catarsis así sean en mis canciones, dice su canción más popular 'El velo se cayó'. Estas mujeres no solo se quitaron el velo, sino que le echaron fuego a esa cultura patriarcal y la invisibilidad que viven en la música.

Flor de Lava, su nombre, es la unión entre la femineidad, la belleza y la diversidad que representan las flores, y lo agreste y hostil de la lava. A pesar de los contextos adversos, con su talento y juntanza, las seis lograron florecer en la lava, un terreno difícil para las mujeres en la sociedad y en la industria musical.

Abrazo colectivo en el Festival de Fuego 2023.

Abrazo colectivo en el Festival de Fuego 2023.

Foto:María Zárate @zaratefilm

Según cifras presentadas por la ONU en el artículo Mujeres en la música, silenciadas por la desigualdad de género, solo tres de cada 10 personas en la industria musical son mujeres. Y en la lista de éxitos globales, solo una de cada cinco artistas es mujer, de acuerdo con datos presentados por Spotify en el estudio Mujeres a todo volumen: la situación de la mujer en la industria musical.

Las integrantes de Flor de Lava hacen parte de esa industria. María McCausland es barranquillera, cantante, compositora y periodista; Brina Quoya es bajista, cantante, compositora y productora; Paula van Hissenhoven es cantante, compositora y tecladista; Sabi Satizábal es cantante, compositora y guitarrista; Natalia Medina y Pilar Cabrera son cantantes y compositoras.

Cada una es una artista independiente que ha encontrado en el colectivo un refugio y un apoyo. Juntas han sacado cuatro canciones. Pero tienen más de 100.000 seguidores solo en Spotify. Sus letras celebran lo que significa ser mujer, madre, hermana, amiga y artista. Y reflexionan sobre los estereotipos de género y la aceptación de esos roles.

Su presencia en la industria no se queda solo en hacer canciones. Por eso desde hace tres años que organizan el Festival de Fuego, un espacio que busca visibilizar a las mujeres en la industria cultural del país.

Sentadas, muy juntas, explican el porqué del festival: “Vamos a formar un incendio, para que cada una propague su propio fuego”. “Ojalá todo esto las inspire a buscar su propio ecosistema”, se les escucha decir a María McCausland mientras las demás asienten.

‘Esto se puso heavy metal’

Cuando el magma sale a la superficie a más de 850 grados centígrados se convierte en lava. ¿Entonces qué pasa cuando se unen seis flores de lava? Fuego. Las integrantes de la agrupación Flor de Lava van a encender con su luz el Hotel W este 19 de octubre con su Festival de Fuego: serán ocho conciertos, tres charlas y un mercado local, todo hecho por mujeres.

María McCausland acepta que están locas. Que en cada festival colapsan, pero apenas terminan se enciende la llama para diseñar el siguiente. La primera edición la hicieron en un mes, mientras que esta se está planeando desde marzo.

En esta tercera edición del Festival de Fuego participarán artistas como a Adriana Lucía, cantante y compositora de cumbias, porros, vallenatos y reconocida por su tropipop. Delfina Dib, que trae su flow desde argentina; Las Áñez, dos hermanas gemelas que cantan música latinoamericana acompañadas con un pedal de loops; Kei Linch y su rap rolo, Paula Pera y El fin de los Tiempos, que canta ritmos futuristas, y Nicolle Jadad y sus espectáculos de electrónica, percusión y coristas. El hotel W no lo sabe, pero ese viernes la W pasará de Wow a Women.

Las Áñez, dueto musical que mezcla la música latinoamericana con un pedal de loops y pequeños instrumentos.

Las Áñez, dueto musical que mezcla la música latinoamericana con un pedal de loops y pequeños instrumentos.

Foto:Andrés Garzón Forero

Luego de muchas invitaciones, Las Áñez por fin tocarán en el festival. Dicen que como el sentido del evento es la colectividad, se sienten “más tranquilas que en otros. Va a haber aceptación por encima de lo que sea y eso nos va a dejar ser a todas”. Además, resaltan la oportunidad de trabajar con mujeres en la logística, en el sonido, en la producción, que no siempre están tan presentes.

Las mujeres en la música “siempre estuvimos ahí, solo no nos conocíamos”, dice Nicolle Jadad, que el año pasado participó como voluntaria del festival. En ese evento se sorprendió al ver que las mujeres en la música ya no son competencia. Este año hace parte del cartel y cantará su álbum 'Mis plantas muertas', una invitación a explorar cualquier posibilidad de surgir. Cada canción tiene el nombre de una mujer que ella ha creado.

A los ocho conciertos se suman charlas como 'El placer sexual sin culpas' y el oficio de 'Ser mujer en la industria musical; una mirada desde la diversidad'. Un ejercicio para entablar conversaciones, reflexionar y compartir conocimientos.

En la entrada del evento se instalará, además, el Mercado Local, en el que las emprendedoras estarán preparadas para el tarot, el flash tatoo y los rituales de plantas. Una feria de productos hechos por y para mujeres.

La primera chispa

La antesala de la tercera edición del Festival de Fuego empezó el 3 de octubre en lo alto: en el piso 16 del Hotel W Bogotá, en la suite presidencial para ser exactos. Entre la abundancia de mujeres que conversaban, compartían y comían pastelitos, resaltó un hombre: Ricardo González, curador de música del Hotel W, que “le metió la ficha” para que esta versión se realizara allá. Las está apoyando porque, además de ser personal administrativo del hotel, es músico.

Vamos a formar un incendio, para que cada una propague su propio fuego.

Al festival también lo apoyan marcas como ProFamilia, Monte Manglar, We Make, Noise y la distribuidora Symphonic. Además, el acompañamiento y la asesoría ambiental de Marce ‘La Recicladora’ harán del festival un incendio sostenible. El festival, a su vez, realizará un acto de sororidad donando una parte de sus ganancias a la Academia Mujer Origen, dedicada a brindar herramientas de autoconocimiento y empoderamiento económico a las personas.

Otro fuego para el cartel

Además de las reconocidas cantantes del cartel, en esta edición se eligió nuevamente, por medio de una convocatoria abierta, a una artista nacional emergente que sumará su voz a las demás. “Por favor, que se propague ese fuego”, dijeron las flores de lava para iniciar la competencia en la antesala del festival.

Flor de lava, una juntanza de mujeres para visibilizarse en la música.

Flor de lava, una juntanza de mujeres para visibilizarse en la música.

Foto:Cortesía. Daniela Ramírez Martínez

Así se dio inicio al concierto que completó el cartel oficial. Las tres finalistas de entre más de 80 candidatas cantaron en el tercer piso del W, lugar donde se llevará a cabo el festival.

Las participantes: Brency, que trajo rock, funky y pop rock desde Barranquilla; Valeria López, que trajo bambuco, bolero y bossa nova desde Cali; Ivanny, que trajo pop, RyB y soul desde Venezuela y en compañía de su guitarra puso al público a hacerle los coros. Ivanny fue elegida por las tres jurados como la ganadora y ahora hace parte del cartel.

“Yo soy una soñadora, por eso le digo a mi público los soñadores”, dijo ilusionada antes de tocar. A propósito del festival, Ivanny dijo que “el fuego quema, da miedo”. Pero también da calor.

Con el cartel completo, las charlas preparadas y la feria local llena de emprendedoras. La fogata está lista para el Festival de Fuego 2024: que busca abrasar a las mujeres en la música.

LEIDY JULIANA RESTREPO MESA

Escuela de Periodismo Multimedia EL TIEMPO

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