Desde hace más de dos años se viene alertando de un posible racionamiento en el 2025 debido a un crecimiento en el consumo de electricidad en Colombia y los retrasos que han registrado los proyectos para generar y transportar energía adicional.
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Esta preocupación ha venido aumentando en las últimas semanas y también la comparte XM (operador del sistema eléctrico) por la disminución que se ha registrado en el nivel de los embalses que se usan para generar electricidad.
Según ha explicado el presidente de Andeg, Alejandro Castañeda, cuando se cruzan los escenarios de oferta y demanda, en el 2025 la situación se vislumbra “demasiado apretada” porque no hay ninguna holgura.
Mientras que para los años siguientes se registran déficits. Para el periodo 2026-2027 el faltante sería del 2 por ciento y para el 2027-2028 aumentaría al 4 por ciento. “No tenemos la energía firme disponible para poder garantizarles a los usuarios la promesa de tener energía eléctrica 24/7”, destacó.
Para cubrir estos faltantes de energía eléctrica hay dos alternativas. La primera son unas subastas de reconfiguración para que las plantas de generación que ya operan en el país puedan comprometer energía firme adicional.
De acuerdo con el director ejecutivo de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), Antonio Jiménez, en los próximos días se expedirá la resolución que establece las condiciones para convocar tres subastas de reconfiguración antes de que finalice el año.
Y para cubrir el déficit que se tendría a partir del 2027, la Creg tiene pensado convocar una subasta de cargo por confiabilidad que va dirigida a nuevos proyectos de generación, aunque aún no hay una fecha definida para este proceso.
La urgencia de esta subasta también se debe a los retrasos que registran varios proyectos que debían garantizar nueva energía firme, que es la que deben entregar las plantas cuando existen veranos intensos que afecten la operación de las hidroeléctricas o cuando ocurre una falla en el sistema, con el fin de evitar un racionamiento.
Datos de XM indican que en 2021 entró solo el 7 por ciento de la nueva energía que se esperaba; en 2022 fue el 28 por ciento y en 2023 ingresó apenas el 17 por ciento de lo esperado.
En lo que resta del 2024 se espera la entrada de 103 nuevos proyectos, pero solo 47 (918 megavatios) son iniciativas que realmente tienen un compromiso de entregar energía firme. Sumando esa cantidad a los que ya entraron en el primer semestre del año, en total se adicionarían menos de 2.000 megavatios a la capacidad instalada de Colombia.
“No es un número despreciable, pero la realidad es que no es el ritmo que necesita el país para atender el crecimiento de la demanda de hoy y el que esperamos suceda con una mayor electrificación de la economía. Este es un panorama que nos debe preocupar”, comentó la presidenta de Acolgén, Natalia Gutiérrez.
Además, aseguró que esta situación la vienen advirtiendo los gremios desde hace varios años y no se puede dejar que el tiempo siga pasando sin tomar las medidas adecuadas que ayuden a solventar esta situación.
En este sentido, afirmó que “es fundamental incentivar la entrada en operación de nuevos proyectos tanto de transmisión como de generación, con reglas de juego claras y favorables, sin tintes intervencionistas, y sin eliminar beneficios” como ocurrió en la reforma tributaria de 2022.
El gerente general de AES Colombia, Federico Echavarría, coincide en la necesidad de mantener las reglas de juego del sector para solucionar la confiabilidad en el mediano plazo. “Si el país quiere tener expansión, no podemos cambiar las reglas de juego y necesitamos confianza inversionista”, agregó.
Además, dijo que se requiere contar con todas las tecnologías: hidroeléctricas, eólicas, solares y termoeléctricas, siendo estas últimas las que “más rápido se pueden construir en el corto plazo para asegurar que ese déficit no se convierta en un apagón”.
El gerente general de Enel Colombia, Francesco Bertoli, también comentó que Colombia no puede dejar de lado la construcción de nuevas plantas de generación, al tiempo que destacó que en el corto y mediano plazo las térmicas “van a jugar un papel absolutamente fundamental”.
Pero para que entren más térmicas que puedan garantizar una confiabilidad en la prestación del servicio de energía eléctrica, la gerente general de Prime Energía Colombia, Patricia Mejía, pidió que se agilicen los permisos de conexión que debe dar la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme).
Según manifestó, la adjudicación de permisos de conexión a la red nacional del año pasado “está un poco atorada y sabemos que aplicar a nuevos permisos de conexión en este momento es difícil”. Por ello, Patricia Mejía reiteró que actualmente el tema más crítico es que entren nuevos proyectos de generación para asegurar que en el próximo fenómeno de El Niño que se presente y en los años venideros, el sector eléctrico pueda responder de la misma forma que lo hizo en el 2024.
También señaló que se necesita más gas natural para la operación de Termovalle en el próximo verano, porque en el país no hay suficientes recursos. Esta térmica está ubicada en el municipio de Palmira, Valle del Cauca, y cuenta con una capacidad instalada de 241 megavatios.
Este llamado coincide con el anuncio que hizo Ecopetrol esta semana de restringir el suministro de gas natural vehicular a nueve empresas para darles prioridad a las termoeléctricas, que han venido aumentando su operación debido a la prolongada escasez de lluvias en Colombia.
Esto ha causado que el nivel de los embalses sea del 50,20 por ciento al 19 de septiembre, casi 10 puntos porcentuales por debajo del 60,06 por ciento que se alcanzó el pasado 7 de julio luego de superar el fenómeno de El Niño.
Ante la baja cantidad de lluvias, el nivel de los embalses podría seguir disminuyendo y llegar a mínimos históricos. Como referencia, este año el nivel más bajo estuvo en un 28,56 por ciento a mediados de abril y, según estimaciones iniciales de XM, se podría llegar a menos de un 13 por ciento el próximo año.
Esta decisión de Ecopetrol afectará a las empresas que firmaron 12 contratos de firmeza condicionada, es decir que reciben el combustible, siempre y cuando no se presente una contingencia de escasez como la que actualmente está afrontando el país por la falta de lluvias.
Mientras que estarán exoneradas las compañías que firmaron contratos de opción de compra de gas, que son los que cuentan con un seguro o protección especial, en caso de presentarse situaciones de escasez como la que enfrenta el país actualmente.
Este anuncio de Ecopetrol se suma al fallo del juzgado IV Laboral del Circuito de Santa Marta que ordenó suspender temporalmente las actividades de exploración y producción en Uchuva-2, un pozo que en agosto de este año confirmó la extensión de un gran descubrimiento de gas natural en mar Caribe colombiano. Este pozo es clave para aumentar las reservas de gas natural de Colombia, que al cierre de 2023 alcanzaban para solo 6,1 años, según datos reportados por la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH).
Sin embargo, el juzgado ordenó paralizar el proyecto hasta que Ecopetrol y su socio Petrobras realicen una consulta previa con la comunidad indígena de Taganga. Esta decisión fue impugnada tanto por Ecopetrol y su socio Petrobras como por la Anla y los ministerios de Ambiente, Interior y de Minas y Energía, con el fin de reactivar las actividades en este pozo.
Más allá de esta orden judicial, las bajas reservas de gas natural de Colombia es otra preocupación que ronda el sector eléctrico. Para el presidente del Grupo Energía Bogotá (GEB), Juan Ricardo Ortega, es urgente contar con una Creg completa, con sus seis expertos, porque se deben expedir varias medidas regulatorias, particularmente, flexibilizar los contratos de gas natural.
“Gas natural no hay y habrá que sacar contratos a seis o tres meses, o al periodo que sea”, manifestó. También planteó que una forma de habilitar nuevos recursos es que se construyan los parques eólicos de La Guajira, que tienen varios años de retrasos.
Sumado a esto, el presidente del GEB dijo que se debe repensar las normativas ambientales y la forma de aprobar los proyectos de la transición energética, de lo contrario, será muy difícil construir las obras que se requieren en el corto plazo.
Ante esta situación que atraviesa el sector eléctrico, XM recomendó asegurar que los proyectos de generación y transmisión de energía eléctrica entren en operación, además de diversificar el parque de generación. “Hoy más que nunca se necesita que entren los proyectos eólicos, pero también que los hidráulicos y térmicos puedan contar con incentivo para operar”, señaló.
Al igual que los empresarios, también pide garantizar el suministro de combustibles, especialmente de gas natural, lo cual se logra incentivando la exploración y producción en el territorio nacional.
Otra recomendación que hace XM es levantar las restricciones ambientales de los embalses, especialmente en una planta como Hidroituango. Así mismo, pide reducir la incertidumbre por medidas que pudieran limitar el uso del agua en la generación de energía eléctrica.
Entre tanto, el viceministro de Energía, Javier Campillo, aseguró que ante las alertas de racionamiento de energía que hay para el 2025 se están retomando varias medidas que se implementaron durante el fenómeno de El Niño de este año.
Igualmente, el Ministerio de Minas y Energía está revisando el Estatuto para Situaciones de Riesgo de Desabastecimiento para que las termoeléctricas puedan aumentar su generación de energía eléctrica con el fin de forzar la recuperación del nivel de los embalses.
Medidas por el bajo nivel de los embalses
El Gobierno Nacional alista varias medidas regulatorias para garantizar una óptima recuperación de los embalses que se usan para la generación de energía eléctrica.
Una de estas es un proyecto de resolución de la Creg que está en consulta para autorizar que las plantas menores y autogeneradores con una capacidad instalada superior a un megavatio puedan entregar al sistema la máxima cantidad de energía posible para atender el consumo de los usuarios.
La Creg también está actualizando el proyecto normativo que permite a la industria participar en la demanda desconectable voluntaria, lo cual permitiría realizar un consumo inteligente por parte de los usuarios de este sector. Se espera que en los próximos días la propuesta sea sometida a comentarios de la ciudadanía.
Adicionalmente, para habilitar energía térmica adicional para atender la demanda, el Ministerio de Minas y Energía alista medidas transitorias de abastecimiento que permitan recuperar el sistema luego del fenómeno de El Niño.
Además, el ministerio ordenó que las exportaciones de energía a Ecuador se realicen con la energía térmica que no sea necesaria para el despacho nacional. Por lo tanto, las exportaciones se harían con excedentes que no se requieran para la atención de la demanda.
Esto se suma a la reactivación de las campañas de ahorro y uso eficiente de la energía y un seguimiento más frecuente de la situación energética del país a través de la Comisión Asesora de Coordinación y Seguimiento de la Situación Energética (Cacsse).