La pandemia de Covid-19 puso en alto o retrasó muchas cuestiones que ahora están significando riesgos para la población. Como muestra de ello, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, (CDC, por sus siglas en inglés,) están advirtiendo que se ha disparado una infección entre los estadounidenses.
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El número de casos de tos ferina ha crecido más de cuatro veces desde el año pasado. La razón, opinan los expertos, es que hubo una importante caída en las tasas de vacunación debido a la pandemia, cuando los niños no fueron llevados con sus proveedores de atención médica debido a las restricciones de movilidad.
Las cifras oficiales indican que, en lo que va del 2024, se han registrado 14.569 casos de tos ferina, un aumento muy significativo en comparación con los 3.475 casos totales que se registraron el año pasado.
Los CDC indicaron que Pensilvania, Nueva York y California encabezan la lista de los estados con más infecciones. A detalle, tan solo en Pensilvania se han documentado 2.008 infecciones en lo que va de 2024, casi el doble de las cifras que presenta California.
Desafortunadamente, tal como declaró al medio NPR el doctor William Schaffner, especialista en enfermedades infecciosas del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt, todavía no se ha logrado que todos los niños vuelvan a los niveles de vacunación habituales.
Otra de las razones por la cual los contagios han crecido de manera tan preocupante es que usualmente la enfermedad se confunde con resfriados comunes por lo que no es tratada a tiempo. Y el riesgo no es únicamente por la tos ferina sino porque, la vacuna contra esta enfermedad también protege contra la difteria y el tétanos.
Por eso, las autoridades sanitarias piden tanto a niños como a adultos ponerse al día con sus vacunas. En el caso de los adultos, la vacuna contra la tos ferina debe realizarse cada diez años. En los bebés y niños menores de siete años es particularmente relevante debido a que es probable que no tengan tanta tos, pero que dejen de respirar de manera intermitente.
Síntomas de la tos ferina, la enfermedad que crece en Estados Unidos
Uno de los mayores riesgos de la tos ferina, o tos crónica, es que sus síntomas suelen confundirse con los de un resfriado común y otro tipo de infecciones respiratorias, por lo que no es detectada adecuadamente sino hasta que ya se trata de un caso grave.
El Departamento de Salud del estado de Nueva York explica que la tos ferina es una infección bacteriana altamente contagiosa que ocasiona una tos violenta e incontrolable que puede durar semanas o incluso meses.
Alertaron que esta enfermedad inicia como una infección leve en las vías respiratorias superiores con síntomas como estornudos, secreción nasal, fiebre no muy alta y una tos leve. Sin embargo, a las dos semanas, la tos se vuelve más grave y se caracteriza por episodios rápidos y numerosos seguidos de espasmos o un silbido agudo, situación que es más frecuente por la noche. Se presenta dicho síntomas, acuda con su médico para ser tratado a tiempo.