La llegada de la inteligencia artificial (IA) a la vida de todas las personas alrededor del mundo ha logrado diferentes cambios significativos a la evolución tecnológica. Este tipo de sistemas tienen distintas capacidades que los hacen completamente útiles y que actualmente, permiten a los usuarios que los utilicen alcanzar miles de objetivos.
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A pesar de sus grandes funcionalidades, también existen personas malintencionadas que hacen un mal uso de las IA, con la finalidad de estafar y engañar a otros.
Estos individuos logran configurar y trabajar estas tecnologías de manera que otros sujetos no noten que se trata de un fraude y así poder sacar dinero o información privada fácilmente.
Forbes, una revista especializada en el mundo de los negocios y las finanzas, publicó un informe acerca de este tipo de estafas realizadas por medio de las IA y cuenta el testimonio de Sam Mitrovic, un consultor de seguridad de Microsoft.
En este tipo de fraude se dirigen principalmente a los usuarios de Gmail y utilizan algunas técnicas de ‘phishing’, que consiste en engañar a las personas para que compartan información confidencial, potenciadas por el uso de las tecnologías artificiales y así aumentar las posibilidades de éxito para los estafadores.
¿Cómo fue el caso de Sam Mitrovic?
En el caso de Sam Mitrovic, el intento de fraude inició con un mensaje en el que le solicitaban restablecer su cuenta de Gmail a través de un enlace directo para realizar dicho proceso. El caso se puso más serio cuando días posteriores a este comunicado recibió una llamada telefónica que, supuestamente, provenía directamente de Google.
Al principio Mitrovic hizo caso omiso a esta llamada, pues esta compañía no suele hacer un contacto de este tipo con sus usuarios. Sin embargo, días después recibió una nueva llamada mucho más convincente.
En esta oportunidad, la persona que le hablaba le afirmó que era empleado del soporte de Google y le advirtió acerca de una actividad sospechosa en su cuenta. Este individuo le dijo que alguien desde Alemania habría accedido a su perfil de Gmail y descargado información delicada.
En ese momento Mitrovic buscó el número de teléfono del cual se estaba comunicando el supuesto trabajador y este lo llevó de manera directa a una página oficial de la compañía. Esto le hizo pensar que se trataba de una comunicación legítima.
A pesar de que la estafa fue realizada con mucha precaución, la experiencia de Sam como trabajador en el sector de la seguridad electrónica, logró identificar que todo se trataba de un intento de ‘phishing’ a través del uso de IA.
Es importante que usted tenga en cuenta que para reconocer este tipo de fraudes electrónicos debe saber primeramente que ninguna de estas compañías se pondría en contacto telefónico directo sin ser solicitado previamente por usted mismo.
Además, si usted nota algún tipo de urgencia por parte del supuesto colaborador en cuanto a lo que le está solicitando que verifique en su cuenta de Gmail, posiblemente se trate de un intento de estafa.
Para evitar sentir algún tipo de inseguridad en cuanto a la información delicada que tiene vinculada con su cuenta de Google, puede realizar una revisión periódica de la configuración de la seguridad de su cuenta y así no caer en estas trampas electrónicas.
ERIKA LUCIA IBAÑEZ GARCIA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO