¿Qué mensaje le dejaría a sus seres queridos si supiera que esa sería su última oportunidad de hacerlo? Esta difícil pregunta fue respondida por Cecília, una mujer madre de dos hijas que, al enfrentarse al cáncer de estómago, grabó un video para su familia en los últimos días de su vida.
Aunque ya no tenía fuerzas para escribir, decidió usar su celular para transmitir un último mensaje a su esposo Lowell y a sus hijas, Luiza, de 15 años, y Helena, de 10.
Un mensaje que tocó corazones
El video fue encontrado por Lowell semanas después de la partida de Cecília, cuando revisaba el celular de su esposa para resolver asuntos administrativos. "Lo encontré mientras revisaba el celular para temas bancarios, facturas", relató en una entrevista con 'Crescer'.
"Lo vi más de mil veces. Lloré compulsivamente", agregó. Movido por el contenido del video, Lowell decidió compartirlo en Instagram, mostrando un poco de su vida cotidiana con sus hijas en su cuenta @pae_delas.
En el video, Cecília, quien se encontraba muy débil, aparece sonriendo y dice: "Quiero encontrar las palabras perfectas para expresar todo lo que hay en mi corazón, porque ustedes son las personas más importantes de mi vida".
En su mensaje, también expresó su arrepentimiento por el tiempo que no pasó con su familia debido a las obligaciones laborales: "Si pudiera volver atrás, habría pasado menos tiempo frente a la computadora y más tiempo contigo. Pero no podemos volver atrás y todo forma parte de nuestra historia", añadió.
El video fue grabado el 1 de agosto de 2019. Solo dos días después, Cecília fue conectada a oxígeno y, el 6 de agosto, falleció mientras estaba de la mano de Lowell.
El inicio de una historia de amor y lucha
Lowell y Cecília se conocieron en un gimnasio en Belo Horizonte, donde ambos asistían con regularidad. Después de algunos meses de conocerse, descubrieron que trabajaban en la misma empresa, aunque en áreas distintas. Con el tiempo, Lowell, cuyo trabajo requería constantes viajes, y Cecília comenzaron a salir. Fue en uno de esos viajes a Hopi Hari que decidieron mudarse juntos y, poco tiempo después, casarse y formar una familia.
"La vida era perfecta hasta que Cissa comenzó a perder peso y a sentir dolores abdominales", recordó Lowell. Tras consultar con varios médicos y recibir un diagnóstico inicial de infección bacteriana, Cecília finalmente fue diagnosticada con cáncer de estómago poco antes del Carnaval.
"El cáncer es una palabra muy seria", dijo Lowell, quien recuerda que el diagnóstico fue devastador para la familia, especialmente con dos hijas pequeñas.
El diagnóstico de cáncer fue dado días antes del Carnaval, afectando profundamente a la familia. Foto:iStock
El diagnóstico y la lucha por la vida
El diagnóstico llegó justo antes del Carnaval y, aunque la familia trató de seguir adelante, el miedo y la tristeza estaban presentes. "Llevamos a nuestras hijas a una pequeña fiesta vecinal. Allí, en medio de todo, con la banda tocando, ambas nos echamos a llorar", relató Lowell. La enfermedad se convirtió en un desafío constante.
Después de la cirugía inicial, la vida de la familia cambió por completo. Lowell se dedicó a cuidar a Cecília, y agradeció el apoyo de su empleador, que le permitió estar al lado de su esposa durante todo el proceso de tratamiento. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, la enfermedad avanzó y, al final, los médicos informaron que el cáncer había invadido varios órganos.
La despedida y la vida después de la tragedia
A pesar de que la familia sabía lo que estaba por venir, Lowell y Cecília decidieron despedirse de manera serena. "Nunca nos vamos sin decirnos que nos queremos, sin abrazarnos, sin besarnos", dijo Lowell sobre la última despedida en casa. Poco después, Cecília falleció, rodeada de su familia, y sus hijas se despidieron de ella con la esperanza de recordarla siempre.
La familia vivió un proceso de luto que incluyó un viaje al cementerio para que las niñas pudieran despedirse de su madre. "Fue un momento de mucha reflexión, de mucho dolor, de mucha angustia, de añoranza, de recuerdos", recuerda Lowell, quien también pasó por su propio sufrimiento mientras cuidaba a sus hijas.
Después de la muerte de Cecília, la pandemia llegó como un nuevo reto para Lowell y las niñas. Para enfrentarlo, Lowell decidió crear la página de Instagram "Pãe delas", en la que compartió la rutina diaria con sus hijas, creando nuevos recuerdos juntos. “Nos acercó más”, dijo Lowell sobre la experiencia, que les permitió superar las dificultades y fortalecer su vínculo.
Con el tiempo, la familia comenzó a encontrar un nuevo equilibrio, manteniendo vivo el recuerdo de Cecília mientras avanzaban en su vida diaria. Lowell resaltó la importancia de mantener vivos los recuerdos de su esposa, colocando fotos familiares en lugares accesibles para sus hijas. "Quiero que siempre tengan estos buenos recuerdos", concluyó.
Hoy, la familia sigue adelante, honrando el legado de Cecília y creando nuevos recuerdos, con la esperanza de mantener el espíritu de unidad y amor que ella les enseñó hasta el final.
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O Globo (Brasil0 / GDA
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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de O Globo (GDA), y contó con la revisión de un periodista y un editor.