Día 3 de la novena de Navidad y Aguinaldos: oraciones, reflexiones y villancicos para este 18 de diciembre

hace 4 meses 47

Con la llegada del tercer día de novenas de aguinaldos, que tradicionalmente se realizan entre el 16 y 24 de diciembre, le traemos todo lo relacionado con el día dos y el orden correcto para realizar las oraciones, según la Arquidiócesis de Bogotá.

Villancico introductorio

Se recomienda iniciar las novenas de cada día con un villancico, con el fin de liberar buenas energías y felicidad, para tener toda la atención centrada en las oraciones siguientes. Este tercer día, la tradicional novena se iniciará con Tutaina. 

Oración para todos los días

Bondadoso Dios de infinita caridad, que tanto amaste a los hombres, que les diste en tu Hijo la mejor prenda de tu amor, para que, hecho hombre en las entrañas de una Virgen, naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio.

Nosotros, en nombre de todos los mortales, te damos infinitas gracias por tan soberano beneficio. En retorno de él te ofrecemos la pobreza, humildad y demás virtudes de tu Hijo humanado, suplicándote por sus divinos méritos, por las incomodidades con que nació y por las tiernas lágrimas que derramó en el pesebre, que dispongas nuestros corazones con humildad profunda, con amor encendido, con total desprecio de todo lo terreno, para que Jesús recién nacido tenga en ellos su cuna y more eternamente.

Amén.

Gloria al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo.

Día tres novena de Navidad

Día tres novena de Navidad Foto:DALL-E, generador de imagenes de ChatGPT

Reflexión del tercer día

Luego del anuncio del ángel Gabriel, la virgen María dejó Galilea y se fue a la región de Judá a visitar a su prima Isabel, quien, según el ángel, esperaba un hijo en su ancianidad. María comprendió que Dios había hecho en Isabel un gran milagro.

Decidieron ir en su ayuda para acompañarla en los últimos meses de su embarazo y en el parto de aquel que sería llamado Juan el Bautista. (cf. Lucas 1, 39-40).

María hizo un gran recorrido, aproximadamente de cien kilómetros, pues entendía que, en ella y en su prima, Dios había comenzado la instauración de su reino entre los hombres. Su peregrinaje se convirtió en una experiencia contemplativa que le permitió meditar el misterio que crecía en su vientre, de modo que nunca se sintió sola, sino, acompañada por aquel de quien el ángel había dicho: “se llamará Hijo de Dios”. Llegó a ser peregrina de la esperanza mientras caminaba y meditaba.

Ponerse en camino es un gesto típico de quienes buscan el sentido de la vida y lo hallan en el silencio, el esfuerzo y la meditación. Por eso, nosotros estamos llamados a unirnos a este peregrinaje de la Virgen, para redescubrir el valor de lo esencial y el sentido de caminar con Cristo.

El Papa Francisco ha anunciado que el 2025 será un Año Jubilar, algo que ocurre cada 25 años y que se entiende como un tiempo de gracia y bendición. El Jubileo lleva por nombre “Peregrinos de esperanza”, ya que el mundo actual padece el flagelo de las guerras, las discordias 'Ad Intra' de las naciones, el cambio climático, la desigualdad social y otras tantas realidades que pretenden apagar los anhelos y los sueños de la humanidad. 

El Año Jubilar iniciará en Roma este 24 de diciembre y el domingo siguiente en todas las diócesis del mundo. Por eso, estamos llamados a vivir el Jubileo como un peregrinaje con la Virgen María, que camina a nuestras casas, llevando en su seno al Mesías, la mayor esperanza que puede acompañar nuestra existencia.

Como peregrinos de esperanza, redescubramos el sentido de la vida, renovemos la dicha de encontrarnos y de celebrar juntos, recuperemos la memoria de lo bueno que hemos hecho y de lo que queremos alcanzar, superemos las fronteras de la desigualdad, de las razas y de los pensamientos excluyentes que nos impiden reconocer aquello que nos une y nos lanza a objetivos comunes que favorecen la paz, la solidaridad y el progreso de los pueblos. De ese modo revitalizaremos nuestra esperanza y el motivo para seguir viviendo y trabajando por lo que somos y queremos llegar a ser, de la mano del Señor.

Oración a la Virgen María

Oración a la Virgen María Foto:DALL-E, generador de imagenes de ChatGPT

Oración a la Santísima Virgen María

Soberana María, que por tus grandes virtudes y especialmente por tu humildad, merecisteis que todo un Dios te escogiese por madre suya. Te suplicamos que tú misma prepares y dispongas mi alma y la de todos los que en este tiempo hiciesen esta novena, para el nacimiento espiritual de tu adorado Hijo.

¡Oh, dulcísima Madre! Comunícanos algo del profundo recogimiento y divina ternura con que le guardaste, para que nos hagáis menos indignos de verle, amarle y adorarle por toda la eternidad. Amén.

Dios te salve, María.

Oración a San José

Oración a San José Foto:DALL-E, generador de imagenes de ChatGPT

Oración a San José

¡Oh Santísimo José, esposo de María y padre adoptivo de Jesús! Infinitas gracias damos a Dios porque te escogió para tan altos ministerios y te adornó con todos los dones proporcionados a tan excelente grandeza.

Te rogamos, por el amor que tuviste al Divino Niño, que nos abraces en fervorosos deseos de verle y recibirle sacramentalmente, mientras en su divina esencia le veamos y le gocemos en el cielo.

Amén.

Padre Nuestro.

Gozos

Gozos Foto:DALL-E, generador de imagenes de ChatGPT

Gozos para todos los días

  • Dulce Jesús mío, mi niño adorado ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!
  • 1. ¡Oh, Sapiencia suma del Dios soberano, que a infantil alcance te rebajas sacro! ¡Oh, Divino Niño, ven para enseñarnos! la prudencia que hace verdaderos sabios!
  • 2. ¡Oh, Adonai potente que Moisés hablando, de Israel al pueblo diste los mandatos! ¡Ah, ven prontamente para rescatarnos, y que un niño débil muestre fuerte el brazo!
  • 3. ¡Oh, raíz sagrada de José que en lo alto! presenta al orbe tu fragante nardo! Dulcísimo Niño que has sido llamado Lirio de los valles, bella flor del campo.
  • 4. ¡Llave de David que abre al desterrado! las cerradas puertas del regio palacio! ¡Sácanos, oh Niño con tu blanca mano, de la cárcel triste que labró el pecado!
  • 5. ¡Oh, lumbre de Oriente, sol de eternos rayos, que entre las tinieblas, tu esplendor veamos! Niño tan precioso, dicha del cristiano, luzca la sonrisa de tus dulces labios.
  • 6. ¡Espejo sin mancha, santo de los santos, sin igual imagen del Dios soberano! ¡Borra nuestras culpas, salva al desterrado y en forma de niño, da al mísero amparo.
  • 7. ¡Rey de las naciones, Emmanuel preclaro, De Israel anhelo Pastor del rebaño! ¡Niño que apacientas con suave cayado, ya la oveja arisca, ya el cordero manso!
  • 8. ¡Ábranse los cielos y llueva de lo alto, bienhechor rocío como riego santo! ¡Ven hermoso Niño, ven Dios humanado ¡Luce, Dios estrella! ¡Brota, flor del campo!
  • 9. ¡Ven, que ya María previene sus brazos, do su niño vean, en tiempo cercanos! ¡Ven, que ya José, con anhelo sacro, se dispone a hacerse de tu amor sagrario!
  • 10. ¡Del débil auxilio, del doliente amparo. Consuelo del triste, luz del desterrado! ¡Vida de mi vida, mi dueño adorado, mi constante amigo, mi divino hermano.
  • 11. ¡Ven ante mis ojos, de ti enamorados! ¡Bese ya tus plantas! ¡Bese ya tus manos! ¡Prosternado en tierra, te tiendo los brazos, y aún más que mis frases, te dice mi llanto!
  • 12. ¡Ven Salvador nuestro por quien suspiramos. Ven a nuestras almas, Ven, no tardes tanto!

Oración al Niño Jesús

Oración al Niño Jesús Foto:DALL-E, generador de imagenes de ChatGPT

Oración al Niño Jesús 

Acuérdate, ¡oh, dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la venerable Margarita del Santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente. “Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado”.

Llenos de confianza en ti, oh Jesús, que eres la misma verdad, venimos a presentarte toda nuestra miseria. Ayúdanos a llevar una vida santa, para conseguir una eternidad bienaventurada. Concédenos por los méritos de tu encarnación y de tu infancia, la gracia de la cual necesitamos tanto.

Nos entregamos a ti, ¡!oh Niño omnipotente!, seguros de que no quedará frustrada nuestra esperanza y de que, en virtud de tu divina promesa, acogerás y responderás favorablemente nuestra súplica. Amén.

Gloria al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo.

Villancico de cierre

Para finalizar el segundo día de novena es recomendable hacerlo con un villancico. Le recomendamos el Noche de paz.

ALEJANDRA HERNÁNDEZ TORRES

REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL

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