De rebusque a empleo forma: Barranquilla, entre las ciudades que más redujo la informalidad laboral en Colombia

En medio de un panorama nacional donde el empleo informal sigue siendo un desafío creciente, Barranquilla se posiciona como un caso de éxito en la consolidación del trabajo digno y protegido. Así lo revela el más reciente informe de la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH) del DANE, correspondiente al trimestre febrero-abril de 2025, en el que el área metropolitana de la capital del Atlántico registra la mayor reducción en informalidad laboral entre las 23 principales ciudades del país.

La cifra es contundente: Barranquilla pasó de tener un 55,3% de informalidad laboral en 2024 a 49,5% en 2025, lo que representa una disminución de 5,8 puntos porcentuales. Este comportamiento contrasta de manera significativa con la tendencia nacional, donde la informalidad aumentó en 0,5 puntos porcentuales, ubicándose en 56,8%.

Un modelo local con resultados visibles

Este avance no es fruto del azar. La caída en la informalidad responde a un enfoque estratégico y multisectorial  del sector público y privado que ha centrado sus esfuerzos en estimular la empleabilidad formal mediante el fortalecimiento del capital humano, la dinamización de sectores clave y la articulación con el sector privado.

La estrategia del Distrito se ha enfocado en crear las condiciones necesarias para que más barranquilleros accedan a trabajos estables, con garantías laborales y acceso a seguridad social. Entre las principales acciones se destacan:

Más empleo, menos desempleo

Junto con el avance en la formalización, los indicadores laborales muestran un panorama alentador para la ciudad. Entre 2024 y 2025, la población ocupada en Barranquilla y su área metropolitana creció en 39.000 personas, pasando de 877.000 a 916.000. Al mismo tiempo, la tasa de ocupación se elevó al 57,5% y el número de personas desempleadas disminuyó en 4.000, llevando la tasa de desocupación a la baja, del 11,4% al 10,6%.

Estos datos reflejan no solo un aumento cuantitativo en el empleo, sino también una transformación en su calidad, al migrar hacia condiciones más estables y formales.

Los avances de Barranquilla en materia de empleo formal cobran aún más relevancia en el contexto de su papel como ciudad anfitriona del Foro de Desarrollo Local de la OCDE 2025. Este evento internacional reunirá a líderes globales para debatir estrategias de inclusión, resiliencia y formalización laboral. 

La capital del Atlántico llegará a ese escenario como referente latinoamericano en desarrollo territorial y buenas prácticas de gobernanza para la generación de empleo digno. Su experiencia se perfila como un modelo replicable en otras regiones del país que aún enfrentan altos niveles de informalidad y precariedad laboral.

Una apuesta por la sostenibilidad

El modelo de desarrollo económico de Barranquilla también tiene una mirada sostenible. La ciudad ha promovido el empleo verde con proyectos como la recuperación ecológica de Puerto Mocho, y ha incentivado la inversión extranjera directa para atraer empresas que generen empleo de calidad en sectores estratégicos.

La ciudad ha entendido que el desarrollo debe ir de la mano del bienestar laboral. Nuestra meta es seguir reduciendo la informalidad y abrir más oportunidades dignas para los barranquilleros

Alejandro CharAlcalde de Barranquilla

Camino hacia un mercado laboral más justo

Mientras otras ciudades del país enfrentan retrocesos en sus indicadores de formalidad, Barranquilla demuestra que es posible cambiar la tendencia a través de políticas públicas coherentes, inversión social y un trabajo articulado entre gobierno, empresa y comunidad.

Para el Distrito, la caída de 5,8 puntos en la informalidad no solo es una cifra alentadora, sino también un mensaje claro: cuando se trabaja con visión de futuro y compromiso con la ciudadanía, el empleo digno y formal puede dejar de ser una promesa para convertirse en una realidad.