En Tuluá reina una tensa calma y una tenebrosa tranquilidad, donde el silencio y el miedo terminan siendo parte de una banda sonora de una atmósfera de terror que en cualquier momento se vuelve a ‘prender’.
En las mentes de muchos habitantes del municipio ‘corazón’ del Valle del Cauca aún queman las llamaradas de los taxis incendiados, al igual que una tienda de cadena y otros establecimientos comerciales.
Las requisas y controles por parte de la Fuerza Pública, son constantes. Foto:Juan Pablo Rueda / EL TIEMPO
El proceso de extradición hacia los Estados Unidos, de Andrés Felipe Silva Marín, también conocido como alias Pipe Tuluá, máximo líder de ‘La Inmaculada’, organización delincuencial que durante décadas había logrado enquistar su engranaje criminal en la cultura tulueña, habría sido la gota que rebosó la copa de la furia de dicha banda, que prefiere desquitarse con los suyos, y a su vez, enviar un mensaje de autoritarismo.
Desde la institucionalidad local y vallecaucana quieren sentar un precedente y dar el mensaje que Tuluá no está sola y no cederá ante los violentos. Sin embargo, también tienen puestos los pies en la tierra y saben que no será una tarea nada sencilla, debido a los tentáculos de la criminalidad, que no respeta edades ni condiciones sociales.
Seguridad ‘golpe a golpe’
Garantizar la seguridad en Tuluá ha sido uno de los retos de la coronel Sandra Liliana Rodríguez, comandante del departamento de Policía del Valle del Cauca. Tan solo asumió el cargo a finales del mes de febrero del presente año y ya sabe de la crudeza de la violencia en el municipio, por cuenta del crimen organizado.
Ante este panorama, le ha apuntado a dar golpes claves que permitan desarticular esta estructura por completo.
“Hay que entender que esta es una empresa criminal, donde la afectación ha sido en su componente estructural, en lo que tiene que ver con aquellos que dirigen y lideran ese tipo de afectaciones o lideran la empresa criminal, pero también se han surtido capturas y debilitamiento a su componente, digamos, operativo, que es el que está en la calle y es el que dinamiza las afectaciones. Entonces, a esa estructura, lógicamente, en materia de investigación, la Policía Nacional, en conjunto con la Fiscalía General de la Nación, durante el año ha hecho investigaciones acompañadas de varias capturas en esos componentes”, explicó la oficial.
Como ejemplo, recordó que en el mes de marzo del presente año, las autoridades capturaron a uno de los líderes financieros de la banda, que tuvo un impacto importante en las finanzas del grupo.
En las vías de acceso al municipio también hay vigilancia por parte de militares. Foto:Juan Pablo Rueda / EL TIEMPO
“Esto hace que otra persona que está dentro de la organización, que en el momento no está siendo visible a nivel investigativo para la Policía, asuma ese rol y siga dinamizando a aquellos otros operarios que aún existen en la estructura, pero hay que ser contundentes. También hay procesos en marcha, que pronto darán se darán los resultados en corto, mediano y largo plazo para que esta estructura finalmente quede completamente debilitada en su componente humano o de operario”, expresó la oficial.
Otro de los aspectos que la oficial considera clave para combatir esta estructura, es la colaboración ciudadana, que si bien, se les ha dificultado, por la continua intimidación a sus habitantes, hay algunos que han sido determinantes a la hora de evitar atentados o direccionar la captura de algún cabecilla.
En Tuluá se reforzó el pie de fuerza, tras los actos de vandalismo y terrorismo de 'La Inmaculada' Foto:Juan Pablo Rueda / EL TIEMPO
“Es muy importante reiterarle a la ciudadanía lo valioso que es parala Fuerza Pública contar con esa información oportuna, porque en los barrios somos una comunidad que se conoce. Y esa comunidad que se conoce cuando ve a una persona que no es de su comunidad, pues ya es un extraño, es objeto de llamar al cuadrante, llamar a la Policía para que nosotros podamos acudir a su identificación y hacer los respectivos registros e investigaciones correspondientes”, comentó.
Agregó que también hay controles en plazas de mercado, donde han logrado capturar a presuntos extorsionistas.
“En estas actividades, pues lógicamente esto deteriora, afecta a la estructura de 'La Inmaculada', que utiliza estos mecanismos para intimidar a los ciudadanos. De igual manera, en esa articulación que tenemos con la Gobernación y obviamente, atendiendo las órdenes e instrucciones del señor ministro de Defensa, Pedro Sánchez; del señor director general de la Policía Nacional, y de nuestra gobernadora Dilian Francisca Toro", mencionó la oficial.
El pago de recompensas, otra herramienta para combatir la criminalidad
Los pagos de recompensas por información que conduzca a la captura de importantes cabecillas de grupos delincuenciales, una estrategia que en épocas anteriores había generado dudas e incertidumbre por su veracidad, hoy en día se ha convertido en una alternativa que según las autoridades vallecaucanas, les ha permitido obtener importantes resultados.
“El pago de recompensas es importante para dar con personas como las que están en el cartel de los más buscados del Valle. También hay una recompensa por información que nos permita neutralizar cualquier afectación”, dijo la comandante de la Policía Valle.
“La seguridad está garantizada, la Fuerza Pública y la institucionalidad está aquí en el municipio y obviamente con la articulación que hacemos vamos a darles mejores resultados a la ciudadanía, pero sobre todo vamos a ser contundentes con estos actores”, concluyó.
‘Quemar un vehículo público en plena calle es un acto simbólico de intimidación’
Ante la nueva ola de violencia que sacudió a Tuluá en las últimas horas, recordando los hechos que, hace poco más de un año, pusieron a este municipio del centro del Valle del Cauca en el foco nacional por cuenta del accionar violento de la banda criminal ‘La Inmaculada’. En esta ocasión, el detonante sería el posible traslado carcelario de uno de sus cabecillas, alias Pipe, quien, según las autoridades, estaría detrás de la orden para ejecutar una serie de ataques que incluyeron la quema de taxis de servicio público y atentados contra locales comerciales, como puestos de chance.
En Tuluá hay tensión por posibles acciones armadas de integrantes de 'La Inmaculada'. Foto:Juan Pablo Rueda / EL TIEMPO
"Es una forma visible de infundir miedo", dijo a EL TIEMPO Guillermo Londoño, secretario de Seguridad del Valle, quien se desplazó al municipio por instrucción directa de la gobernadora del departamento. "Quemar un vehículo público en plena calle es un acto simbólico de intimidación. No es nuevo, ya lo han hecho antes y por eso no podíamos permitir que la amenaza escalara", explicó.
El funcionario recalcó que, ante las alertas, se activaron todos los dispositivos de seguridad, tanto policiales como militares. “La gobernadora fue enfática: todas las capacidades debían estar en función del orden público en Tuluá. Coordinamos patrullajes mixtos con el Ejército, activamos los ocho distritos de Policía, el Gaula desplegó equipos en puntos estratégicos y se tomaron medidas administrativas como toque de queda, restricción al parrillero y al transporte de materiales peligrosos”.
Según Londoño, este tipo de ataques de quema de vehículos se provocan fácilmente. "No se trata de una acción compleja. Una botella con gasolina es fácil de lanzar. Pero con presencia, patrullajes y monitoreo activo, logramos contener la amenaza", explicó.
Punto de casa de apuestas que por poco termina incendiado en su totalidad. Foto:Juan Pablo Rueda / EL TIEMPO
Posible traslado de nuevos integrantes de ‘La Inmaculada’
Uno de los puntos críticos que vuelve a estar sobre la mesa es el traslado de miembros de 'La Inmaculada' a otros centros penitenciarios. Tal como ocurrió en febrero de 2024, cuando la captura de alias Nacho —segundo en la estructura— y otros cinco integrantes, lo que permitió aliviar la presión en el municipio, ahora se evalúa replicar la medida.
"Ninguna posibilidad se descarta. El objetivo es garantizar el orden público y la tranquilidad de los tulueños. Si eso requiere trasladar internos, se hará", dijo el secretario, al ser consultado sobre una eventual medida en este sentido. Añadió que la gobernadora ya inició conversaciones con el alcalde para tomar decisiones administrativas conjuntas.
En parques y sitios públicos también hay patrullajes. Foto:Juan Pablo Rueda / EL TIEMPO
La amenaza persistente
Según el funcionario, la estructura criminal de ‘La Inmaculada’ no solo busca controlar economías ilegales, sino también mantener el miedo como herramienta de poder territorial. “Ya lo hicieron el año pasado. Esto no es espontáneo. Queman taxis porque están en todas las esquinas, porque es visible y atemoriza. Pero también por eso, la respuesta institucional no se puede demorar ni un minuto”, sostuvo.
"La violencia no es nueva en Tuluá, pero tampoco lo es la respuesta del Estado. No podemos permitir que esas formas de terror prosperen. Aquí hay presencia institucional, hay articulación con todas las autoridades, y estamos decididos a judicializar a quienes están detrás de estos actos", reiteró Londoño.
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