El Gobierno cubano reconoció este miércoles en su primera evaluación de daños tras el paso por el occidente de la isla del huracán Rafael con categoría 3 (de cinco) en la escala Saffir-Simpson que las afectaciones en viviendas, infraestructura y la agricultura han sido "muy fuertes".
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El ciclón tocó tierra el miércoles a las 4:20 p. m., hora local, por la costa sur de la provincia de Artemisa y dejó territorio cubano más de dos horas más tarde por la costa norte de Pinar del Río.
El Instituto Meteorológico (Insmet) de Cuba midió vientos de hasta 185 kilómetros por hora y registró intensas lluvias de hasta 200 milímetros (o litros por metro cuadrado).
En Candelaria, un apacible poblado rural a 40 kilómetros de playa Majana, las calles se llenaron de ramas, pero también de tejas y de pedazos de concreto de fachadas de casas que no resistieron la cruel embestida del huracán.
"Estoy desesperada, me quedé sin techo, el techo se me fue y no sé que voy a hacer", dijo a la AFP Marta León Castro, una funcionaria de 57 años, todavía asustada y con lágrimas en los ojos.
Estoy desesperada, me quedé sin techo, el techo se me fue y no sé que voy a hacer
Los vecinos blindaron con tablones puertas y ventanas de sus casas, algunos incluso ataron sus techos de aluminio con cables o los llenaron con sacos de arena, para evitar que salieran volando.
Pero solo en la cuadra donde vive León, al menos cinco familias perdieron los techos de forma parcial o total. "Estoy nerviosa, no sé lo que va a pasar", añadió la mujer antes de salir sin control a caminar bajo la lluvia, mientras sus vecinos intentaban calmarla.
Miles de personas fueron evacuadas en pueblos costeros de Artemisa y 21.000 en Pinar del Río.
Los fuertes vientos y las lluvias de Rafael también afectaron a La Habana, donde viven dos millones de personas. Los comercios fueron cerrados y en varias gasolineras se retiraron la bombas de combustible, mientras que las calles lucían casi vacías.
Según el diario oficial Granma, se suspendieron "las operaciones aéreas" en la región occidental del país, medida que incluye a los aeropuertos de La Habana y del famoso balneario de Varadero, en la vecina provincia de Matanzas.
Hoteles de la capital se encontraban llenos de turistas varados, que en algunos casos se reunieron a la luz de velas en los restaurantes y vestíbulos de estos hospedajes esperando que se calmara el temporal.
Desde el martes, las clases se interrumpieron en varias provincias. En La Habana y otras localidades del oeste de Cuba también paró el servicio de transporte público de pasajeros.
Nuevo apagón total por cuenta del huracán Rafael
El presidente del país, Miguel Díaz-Canel, escribió en redes sociales al término de una reunión del Consejo de Defensa Nacional que se han registrado "grandes afectaciones en Artemisa, Mayabeque y La Habana", tres provincias occidentales.
Avanzó asimismo que tiene previsto visitar desde este jueves "los territorios más impactados por el huracán". "Ya comienza un nuevo proceso de recuperación", indicó.
Por su parte, el primer ministro, Manuel Marrero, agregó en una intervención especial en la televisión estatal que los daños han sido "muy fuertes en las viviendas, infraestructura y agricultura".
Explicó además que el apagón total que provocó en el país este ciclón, el segundo evento de "cero cobertura energética nacional" en apenas dos semanas, está aún por evaluar debido a las inclemencias meteorológicas.
Por la noche, Lázaro Guerra, director de electricidad del ministerio de Energía y Minas, precisó que "la salida de generadores y el disparo de líneas de transmisión provocaron la caída del sistema" eléctrico nacional de Cuba, de 10 millones de habitantes.
A la complejidad técnica del restablecimiento del Servicio Eléctrico Nacional (SEN) hay que añadir la reparación física de cables y postes estropeados por los fuertes vientos, explicó a este respecto en redes sociales el Ministerio de Energía y Minas (Mined), quien demandó "tiempo" para la recuperación.
"Se trabaja en la creación de subsistemas eléctricos en el centro y el oriente de Cuba. En occidente este proceso será más lento, se deben revisar las líneas y las instalaciones eléctricas necesarias", refirió el Mined.
Marrero concluyó su intervención diciendo: "Tengan la seguridad de que nos recuperaremos y saldremos adelante. ¡Hasta la victoria siempre!".
Rafael ha afectado a más de cuatro millones de cubanos y sus estragos comenzarán a ser visibles a partir de este jueves.
Éste es el segundo huracán que toca tierra en Cuba en lo que va de año. El anterior, Óscar, pasó hace algo más de dos semanas por el extremo nororiental de la isla y dejó 8 muertos, daños en 12.000 viviendas y 13.000 hectáreas de cultivos dañadas.