Si la figura del equipo es un lateral, eso no es habitual, no vende, no seduce. Si es lateral izquierdo, tal vez, pues es zurdo, dirán, debe tener algún talento. El lateral derecho no goza de esa fama, a menos de que sea brasileño. Los demás existen para cumplir el exigente rol de ir y volver y tirar centros.
Por eso, Daniel Muñoz es diferente, porque hace lo que todos, pero además tiene sorpresa, explosión, asistencias y gol. Muñoz, convocado a la Selección Colombia para enfrentar a Brasil y Paraguay en la eliminatoria, no es un lateral derecho común.
De los laterales no se habla mucho. No son las figuras. No son los goleadores. El lateral existe para estar al lado de la banda y aguantar de cerquita los gritos del DT que le dice que suba, que baje, que le apure y que ojo con la espalda. El lateral no suele ser el culpable certificado de la derrota ni el héroe de la victoria. César Luis Menotti, fallecido DT argentino, lo resumió con ironía una vez que la afición chifló a Messi: “¿Y con quién más la va a tomar el público, con el lateral derecho?
El lateral tiene sus funciones aprendidas desde que el fútbol es fútbol. Defender es la prioridad, dirán los conservadores. Desde que ataque y tire un buen centro, sirve, dirán los conformistas. Pero para los más exigentes, está Muñoz, que es capaz de inventar una pared como si fuera un ‘10’ o de llegar a zona de remate como si fuera un ‘9’ o de destrozar una pierna rival como si fuera un hambriento león. James Rodríguez se encargó de darle un empujón: “el mejor lateral del mundo”, respondió a una publicación en redes de su compañero, y el que no lo había visto tuvo que voltear a mirar a la derecha.
El gran momento de Daniel Muñoz: así llega a la Selección
¿Lo es? ¿Es el mejor? A sus 28 años, Daniel Muñoz juega en el Crystal Palace de la Premier League inglesa, la mejor liga del mundo, en un club que lo fichó porque necesitaba a un lateral diferente y que se adaptara rápido y lo vino a encontrar en la liga de Bélgica, en el Genk, donde jugó casi 4 años entre 2020 y 2024. Daniel ha tenido una temporada especial, parece habituado al fútbol inglés, como si lo conociera de toda la vida, ya lleva 3 goles en 27 partidos, y decir 3 goles parece poco, pero no olvidemos que es lateral, y de los derechos. Además, lleva 4 asistencias, otra de sus cualidades. Por algo será que suena en el mercado de transferencias, incluso lo han asociado con el Real Madrid. Hoy está tasado en 25 millones de euros.
Laterales que pasaron por la Selección opinan sobre Muñoz
Los que han jugado en esa posición saben de qué estamos hablando. Eso de correr mucho y lucir poco, de mucho sudor y poco aplauso. Ser lateral es estar amarrado en la frontera de la cancha, cuidando su espalda para que no lo sorprendan. Rubén Darío Bustos fue lateral derecho, jugó en América, en Cúcuta, en Brasil; pateaba tiros libres como si tuviera la virtud de un zurdo. Y jugó con la Selección muchos años.
Rubén Darío Bustos Foto:EFE
Si hoy le preguntan por Muñoz, reconoce su potencial. “Es un lateral con mucha diferencia, son muy pocos los laterales con esas características de llegar fácil a gol, me hace recordar mucho a Juan Pablo Sorín (argentino), cuando terminaba siendo un puntero más de área, tenía esa intuición de llegar al arco, hizo goles como los que hace Daniel. El fútbol hoy ha cambiado mucho para el lateral, antes la obligación era ir por la banda y tirar centros, hoy el lateral interioriza, te arma juagadas de atrás, puede recoger rebotes y patear al arco o entrar como factor sorpresa rompiendo línea defensiva. Es muy bueno lo que hace Daniel: es diferente”, asegura.
Daniel nació en Amalfi, Antioquia. Su historia es particular porque antes de ser futbolista iba al estadio, a la tribuna popular, inmerso en una barra brava alentaba al Atlético Nacional, el equipo del que es hincha. Por esa época, cabello más largo y cuerpo más delgado, les exigía a los jugadores que corrieran y sudaran, tal vez por eso él no ahorra una gota, sabe que otros hinchas le exigen lo mismo.
Pudo no ser lo que es. Casi se retira porque a los 20 años nada que debutaba y se desesperaba. Hizo un intento más y arrancó en Águilas Doradas, y cuando irrumpió en el fútbol profesional, ya no lo paró nadie.
Ese aspecto personal, esa lucha incansable, es lo que más destaca otro curtido exlateral derecho de la Selección Colombia, Gonzalo ‘Chalo’ Martínez. Chalo jugó en Colombia, en Italia, en Estados Unidos, y con la Selección estuvo en dos eliminatorias. Sabe de qué se habla cuando se habla de un lateral como Daniel.
Gonzalo Martínez Foto:Rodolfo González. Archivo EL TIEMPO
“Tiene un nivel sorprendente, lo mostró desde Águilas y en Nacional, por algo se fue a Europa y a Inglaterra. Tiene todo muy claro, sabe para qué está ahí, pasó situaciones difíciles, así que valora lo que vivió. De los laterales no se habla mucho, por ahí de los brasileños, Roberto Carlos, Cafú, Marcelo... pero ahora hablan de un colombiano y eso es un orgullo. Aparte, es una calidad de persona, se nota. Es humilde y disciplinado”, opina el Chalo.
Cuando Daniel agarró el puesto en la Selección, ya no lo soltó. Es un jugador explosivo, a veces temperamental, que se sale de casillas, un guerrero que puede perder el control: en la pasada Copa América fue a defender con furia a Luis Díaz cuando lo molían a patadas en un juego contra Bolivia. Peleó y peleó. Lo expulsaron. “Todos queremos que alguien nos defienda como Muñoz defiende a Díaz”, bromeaban en las redes. Daniel es escudo y espada a la vez: lleva 3 goles con Colombia (en un amistoso contra España, y en la Copa América Paraguay y Brasil). Sus goles no son fortuitos, porque sabe llegar cuando nadie lo espera: como un fantasma que sí asusta.
La voz de un campeón de Copa América
Iván López es de otra generación. Fue lateral derecho campeón con Colombia de la Copa América 2001. Sabe que los tiempos son otros, sobre todo para los laterales. “Su presente es maravilloso, tiene ritmo de competencia, físicamente está bien, sobresale en cada partido y hace goles. Es rápido, con carácter, se adaptó rápido al club y a la Premier. Sabe leer los momentos para abrir el campo, sabe cuándo atacar y jugar de interior”, opina López.
Iván López Foto:Felipe Caicedo. Archivo EL TIEMPO
Daniel Muñoz saca de la monotonía la posición del lateral derecho, hace que los rivales se cuiden de un jugador que es factor sorpresa; hace goles que nadie intuye, y en los duelos va a muerte por cada pelota, con vehemencia y con valentía, como si su corazón latiera en el lado derecho.
Pablo Romero
Redactor de EL TIEMPO
@PabloRomeroET