Un buen sueño de corrido y que cumpla con las ocho horas diarias trae beneficios para la salud de una persona, restaurando su cuerpo y su cerebro, y ayudándolo a prevenir el desarrollo de enfermedades de salud mental y físicas. Sin embargo, también se debe tener en cuenta el tiempo que se tarda en conciliar el sueño, el cual puede indicar cómo está su salud.
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El tiempo que se tarda en entrar en la transición de vigilia al sueño se denomina latencia del sueño. De acuerdo con los expertos, el tiempo que se tarde en ingresar a la fase puede decir mucho sobre los patrones de vida de las personas y su salud mental. Según Science Direct, lo recomendable en adultos es tardar entre 10 y 20 minutos, el dormirse antes o después de ese tiempo puede resultar perjudicial.
Latencia del sueño: el tiempo que tarde puede decir mucho de su rutina
El Dr. Dave Rabin, neurocientífico, psiquiatra y director de Apollo Neuroscience, le comentó al medio HuffPost que dormirse antes de los diez minutos no es malo, pero podría revelar ciertos patrones en la rutina que se deben cambiar.
"Quedarse dormido demasiado rápido puede ser un signo de agotamiento, un signo de que nos estamos esforzando demasiado y, en general, un signo de que no estamos dedicando suficiente tiempo a recuperarnos y descansar", expresó el especialista.
Por su parte, las personas que no pueden conciliar el sueño fácilmente tienen los mismos problemas. Kristen Casey, psicóloga y especialista en insomnio, manifestó: "La dificultad para conciliar el sueño puede ser un síntoma de insomnio, dolor crónico o una afección psicológica o médica". Otros factores como una rutina desordenada, un colchón incómodo o el consumo de cafeína antes de acostarse también afectan al tiempo de latencia del sueño.
La enfermera de salud psiquiátrica de Thriveworks, Catherine Yu, comentó al medio estadounidense que "un horario irregular para acostarse, malos hábitos de sueño, trabajar en turnos no tradicionales, condiciones de salud no diagnosticadas o no controladas como estrés, depresión y ansiedad" pueden contribuir al mal sueño.
Por este motivo, es importante realizar un equilibrio entre ambos polos y adaptar rutinas que produzcan un tiempo de sueño intermedio. De acuerdo con Medline Plus, la mejor manera de conciliar el sueño es dormir en una habitación fresca, alejada de sonidos, con las luces apagadas, sobre una base cómoda y lejos de aparatos tecnológicos.
Otros consejos son limitar el ejercicio antes de acostarse, evitar las siestas durante el día, no tomar alcohol ni cafeína y comer de manera ligera.