Muchas veces las personas quieren empezar una vida saludable, pero les es difícil porque con quienes conviven no les colaboran en este objetivo.
Conforme a los criterios de
Por otro lado, se ha escuchado por momentos que quienes se rodean de personas que tengan ciertos hábitos positivos como hacer ejercicio y alimentarse bien pueden copiarlos, llevando unas actividades saludables a su vida.
El orador Jim Roth menciona que “somos el promedio de las cinco personas con las que pasamos más tiempo”, lo que lleva a pensar que las relaciones personales pueden influenciar el comportamiento y actitud.
De acuerdo con Javier Butragueño, coordinador del Grupo de Trabajo de Ejercicio Físico y Obesidad de la Sociedad Española de Obesidad -SEEDO-, el entorno desempeña una parte fundamental si una persona quiere ejercitarse o seguir en el sedentarismo.
«Desde la estructura urbana que favorece o no la práctica de ejercicio, hasta formar parte de un círculo social que organice rutas que requieran movimiento... Familiares, amigos y dinámicas de trabajo pueden ser variables de riesgo para no moverse o no potenciar hábitos saludables», asegura el profesional.
Si usted ha encontrado en su entorno más cercano que les da pereza o simplemente no les interesa mantenerse activos, conviértase en una persona proactiva, escogiendo rutinas de ejercicio fáciles y con objetivos alcanzables.
Invite a sus más cercanos a optar por actividad física fácil como caminar o hacer uso de la bicicleta, es posible que al verlo que usted se mantiene activo quieran copiar su ejemplo.
De acuerdo con expertos, ser un referente en la familia puede ayudarle a todos los miembros a optar por realizar actividades físicas, pero si pasa la mayor parte de su tiempo libre haciendo scroll en su celular, es muy posible que sus hijos o pareja hagan lo mismo.
Para verificar si usted está cayendo en un entornos obesogénicos o en entornos activo, piuede tener en cuenta estas claves:
Entorno obesogénico
De acuerdo con el portal 'ABC', si usted se encuentra en este entorno presentará:
- Alimentación: acceso predominante a comida rápida y procesada.
- Espacios físicos: predominan los espacios cerrados y pequeños.
- Soporte social: hay poca o ninguna actividad comunitaria relacionada con el ejercicio.
- Opciones de ocio con actividades recreativas pasivas o sedentarias que influyen consumo de alcohol.
- Ambiente laboral con trabajos sedentarios sin incentivos para moverse.
- Los encuentros con familia y amigos están centrados en comer y beber.
- El fin de semana se siguen rutinas sin actividad física y enfocadas en el uso de pantallas.
- Horarios irregulares que impiden un descanso adecuado.
- A nivel personal se prefieren actividades de bajo esfuerzo físico.
Entorno activo
Está en este entorno si:
- Alimentación: hay disponibles opciones saludables y frescas.
- Acceso a amplios espacios abiertos en los que se puede hacer ejercicio con libertad.
- Soporte social: las actividades comunitarias involucran en la práctica de ejercicio regular.
- El ocio incluye actividades recreativas activas y dinámicas que incluyen movimiento y actividad física.
- En el trabajo se hacen pausas activas, con snacks de ejercicio, opciones para estar en movimiento e incluso se dan incentivos por ello.
- Con la familia y amigos se prima el contacto con la naturaleza y la práctica de actividades físicas y deportivas en entornos naturales.
- Priorización del descanso como parte del bienestar general.
- A nivel personal se muestra un interés desarrollado hacia actividades que requieran esfuerzo físico y movimiento.
Cuando usted tiene una motivación y puede más su voluntad que su entorno, está actuando de la forma correcto, puesto que nada que lo que esté en su exterior va a influir en sus ganas de mantenerse activo.
LUZ ANGELA DOMÍNGUEZ CORAL
Redacción Alcance Digital