La salida de Álvaro Moisés Ninco de la Embajada de Colombia ante México -el gobierno lo retiró del cargo cumpliendo una orden del Consejo de Estado- deja abiertas dos preguntas: quién se encargará de liderar dicha misión diplomática y cuál será el futuro del polémico exembajador.
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La primera ya tiene una pista: hay unanimidad tanto en Casa de Nariño como en el Palacio de San Carlos para que el reemplazo de Ninco sea una mujer. Si bien todavía no es claro si se escogerá a alguien de carrera diplomática, se busca que ese alguien se acople a la manera de pensar de la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
“Conversaremos con el presidente, quien es obviamente la persona encargada de definir estos temas, y decidiremos a quién enviamos y designamos para esa embajada. Ojalá, por el momento que atraviesan México y Colombia, sea una mujer", admitió el canciller Luis Gilberto Murillo en entrevista con la W.
En cuanto a Ninco, todo indica que seguirá ligado a la Cancillería. A pesar de las controversias que gravitaron alrededor de su nombramiento -la falta de experiencia- su trabajo en México fue del agrado del canciller Luis Gilberto Murillo.
"Se tomó la decisión de apartar a Moisés, pero la verdad es que hizo una excelente gestión. Visité Ciudad de México en varias ocasiones e interactué con él, hizo un trabajo muy bueno allá. Me parece importante ajustar estos procesos para que los jóvenes también tengan la oportunidad de demostrar sus destrezas en estos cargos", comentó Murillo.
EL TIEMPO pudo conocer que una posibilidad es que Ninco se quede en el Ministerio apoyando el llamado G3 (el bloque de izquierda entre Colombia, Brasil y México que media por una salida a la crisis en Venezuela, aunque recientemente México decidió distanciarse). Otra opción es que trabaje en temas de migración.
"A Moisés me gustaría tenerlo aquí, trabajando en algunos temas de política exterior, sobre todo en lo relacionado con América Latina", fueron las palabras de Murillo en la radio.
Ahora bien, al exembajador no le cayó bien su salida de la Embajada y fue crítico con el fallo que finalmente acató el jefe de la diplomacia. "Es producto de la incomodidad que produce en un Estado construido históricamente a partir de la adultocracia, y en ese sentido quienes emergemos de la lucha social, juvenil y popular contamos con experiencia y calificación importante como para cambiar por primera vez un Gobierno en una dirección progresista", señaló.
El Consejo de Estado respaldó un fallo del Tribunal de Cundinamarca en noviembre de 2023, el cual determinó que la administración desconoció el término de publicación de las hojas de vida de los aspirantes a ocupar un cargo de libre nombramiento y, además, se desconocieron las observaciones que la ciudadanía y el sindicato Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular hicieron su hoja de vida.
Esas observaciones consistían en su experiencia para el cargo. Su designación, desde un inicio, generó molestia, pues según lo constata su hoja de vida, Ninco Daza no posee ningún título universitario. Y tampoco posee experiencia diplomática.
"Yo lo nombré embajador por lo joven, no solo por lo joven, era un reconocimiento a la lucha juvenil en Colombia... Y, por ser joven, lo destituyen, porque dicen que no tiene la experiencia adecuada", dijo, por su parte, el presidente Gustavo Petro.
Con Ninco ya son nueve diplomáticos que han sido retirados de sus cargos por fallos del Consejo de Estado durante el gobierno del presidente Gustavo Petro. El alto tribunal declaró nulo los nombramientos ordenados por el Ministerio de Relaciones Exteriores.
JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ
Periodista de Política