Federico Gutiérrez, revela fuertes opiniones sobre el Gobierno. ‘El ‘clan del Golfo’, el Eln, disidencias de Farc y otras organizaciones se están tomando el país a sus anchas. Se aprovechan de la debilidad del Gobierno, que confunde la paz con la entrega total del territorio’, dice.
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¿Cómo le ha ido de alcalde? A usted lo quieren mucho en esta ciudad y además ha logrado hacer una llave absolutamente exitosa con el gobernador…
Vamos muy bien. En tan solo ocho meses hemos logrado reconstruir una confianza ciudadana que se había perdido en los últimos cuatro años por culpa de la corrupción y de la polarización. Con el gobernador Andrés Julián venimos trabajando de la mano. No estamos enfrascados en las discusiones ideológicas. Muchas veces las ideologías dividen y los valores unen.
Sobre sus diferencias con el exalcalde Quintero: ¿cuáles son las cosas halladas que lo tienen, literalmente, con los pelos de punta?
Llevo ocho meses arreglando el desastre que encontramos. Los entes de control ya tienen las denuncias y las pruebas de la corrupción de lo que hicieron cuatro años en Medellín. Ese nombre es absolutamente irrelevante. Ya hizo el daño y lo estamos arreglando. Aquí en la ciudad ni siquiera pueden estar; la gente no los quiere. Yo más bien estoy dedicado a trabajar. A ejecutar un plan de desarrollo de 40 billones de pesos de inversión, donde las prioridades son la educación, con el presupuesto más alto hoy en la ciudad, 7 billones de pesos, base del concepto de seguridad integral en el que yo creo. Para ello estamos resolviendo problemas de seguridad serios: ya logramos una reducción de homicidios de más de 26 por ciento, la tasa más baja de los últimos 40 años. La tasa del país es del 24,7 por ciento por cada 100.000 habitantes, y aquí estamos llegando a una proyectada del 10 por ciento.
¿Sí es reconstruible todo lo que este señor arrasó? ¿Por ejemplo, el gobierno corporativo de EPM?
Claro. Lo primero que hice fue nombrar un gerente, John Maya, un técnico de toda la vida de EPM. E integramos una junta directiva de lujo. Le hemos devuelto la confianza a la empresa.
¿Ese señor Quintero no podría estar en una colita de esas filas que está armando Petro para continuar, como él lo llama, su gobierno progresista?
No me gusta invocar esas malas energías; ellos que arreglen sus problemas, yo los veo muy enredados. El país no va por buen camino, lo llevan hacia un salto al vacío sin paracaídas. Si ellos creen que la continuidad es la corrupción, pues ahí tienen al mejor exponente. Yo estoy convencido de que Colombia tendrá un cambio en el 2026. Lo importante es que estemos listos y preparados como sociedad y como país. No nos dejemos desconcentrar más. El presidente Petro se levanta todos los días a atacar a todos los sectores, a la prensa, a la oposición, a los empresarios, a las mujeres periodistas, con quienes me solidarizo. No caigamos más en esas provocaciones, dediquémonos a trabajar.
¿Pero no debemos preocuparnos?
Está bien preocuparnos, pero es más importante ocuparnos.
¡Pues es que destruyeron el modelo de salud!
Desde ya tenemos que estar estructurando entre todos cuál será el modelo, una vez haya cambio en el 2026, y tendrá que ser mejor que el que teníamos. También destruyeron el sistema energético frente al tema de exploración de hidrocarburos y de gas, donde ya vamos a tener desabastecimiento el año entrante, que pondrá en riesgo a las familias más pobres. Destruyeron la seguridad a través de la ‘paz total’, que no existe; lo que hay es una entrega total del territorio a las estructuras criminales, y al mismo tiempo, desfortalecieron a nuestra Fuerza Pública. A partir del 2026 recuperemos sus capacidades y daremos la batalla contra las estructuras criminales.
¿Estaría considerando lanzarse a la presidencia?
Hice un compromiso con la gente en Medellín cuando me lancé como candidato a la alcaldía y por mí votó el 74 por ciento de los ciudadanos con casi 700.000 votos. Yo cumplo la palabra. Seré alcalde de Medellín hasta el último día para el que me eligieron, 31 de diciembre del 2027. Pero como alcalde de Medellín sí me duele lo que pasa en el país y por lo tanto no dejaré de hablar de los temas nacionales. Este es un momento en el que no puede haber egos de por medio. La próxima candidatura presidencial requerirá mucha serenidad y deberá representar todos estos valores e intereses de quienes queremos sacar el país adelante.
Además, usted está muy joven y le queda mucha vida por delante…
La confianza tarda mucho en construirse, pero se destruye en tan solo un segundo. No me creo ni el único ni el mejor, ni ningún mesías; quiero a mi ciudad y a mi país. Desde donde esté, seguiré trabajando y cumpliendo la palabra.
Recientemente ha emprendido una batalla durísima contra el turismo sexual en Medellín. ¿Qué ha logrado?
María, mirá, yo sí tomé la decisión desde que arranqué como alcalde de dar una lucha sin tregua en contra de la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes. Cuando veo que hay personas que creen que pueden venir a Medellín a abusar de ellos, dije no más. Al día de hoy llevamos un aumento en las capturas de extranjeros dedicados al tema de explotación sexual superior al 800 por ciento con respecto a la misma fecha del año anterior.
Que sepamos, su antecesor no dio esa lucha cuando pudo…
Esa es la pregunta. ¿Por qué no protegieron a la niñez? Ahí hubo desidia, o, más bien, hay que preguntar si hubo complicidad.
Uy. Qué sablazo. Pues es una lucha vital, porque Medellín y en general Antioquia tienen una tasa muy alta de turismo nacional y extranjero que hay que cuidar y mantener sano…
Tenemos hoy millón y medio de turistas al año en Medellín y vamos creciendo. La mitad extranjeros. Esta ciudad es muy atractiva con su industria del entretenimiento, la innovación, la ciencia y la tecnología. Pero, sobre todo, está la gente, con una energía positiva permanente. Bienvenido todo el mundo, pero no para abusar de nuestras mujeres ni de nuestra niñez.
¿Usted ha sentido, en su ciudad y en su departamento, ese empoderamiento que en el país sentimos de los grupos criminales?
A ver, acá no bajamos una lucha muy dura contra esas estructuras. Pero sí veo con mucha preocupación cómo el ‘clan del Golfo, el Eln, disidencias de Farc y otras organizaciones se están tomando el país a sus anchas. Se aprovechan de la debilidad del Gobierno Nacional al confundir la paz con la entrega total del territorio. El Gobierno Nacional cree que hay que dialogar con cuanto bandido aparece y quieren darles carácter político, cuando son narcotraficantes y gente dedicada a la extorsión, al hurto, a la minería ilegal y al narcotráfico a gran escala. Yo pregunto: ¿dónde está el diálogo con los ciudadanos? Para el Gobierno es prioritario negociar con cuanto bandido aparezca, pero no se sienta a hablar con alcaldes y gobernadores elegidos democráticamente. ¡Qué tan blanditos son con los peores criminales y qué tan duros son con quienes hemos sido elegidos democráticamente! Aquí tienen que cambiar las cosas: a los delincuentes hay que combatirlos y con quienes buscamos siempre un mejor país, así sea con visiones diferentes, ideologías diferentes, tiene que haber diálogo permanente y, sobre todo, con los ciudadanos. ¿O será es que hay que tener un brazalete del Eln, del ‘clan del Golfo’ o de las estructuras criminales para que el Gobierno le pare bolas a la gente? La ‘paz total’ ha fracasado y aquí lo que se necesita es contundencia de parte de la Fuerza Pública en recuperar los territorios; y que llegue la inversión social a todas partes.
¿Usted también ha sentido otro fenómeno que describiría como un desmantelamiento deliberado por parte del Gobierno de las fuerzas del orden?
Claro que lo he sentido. Me duele mucho porque tengo gran cariño por nuestra Fuerza Pública. Esa disminución de capacidades la desmotiva en gran medida. Le hago un llamado a sus integrantes: que aguanten. Cuando se genere ese cambio en el 2026, seguramente volverán a ser respaldados por quien llegue a retomar el orden. Y mientras la Fuerza Pública está maniatada, los ceses del fuego les permiten a las estructuras criminales fortalecerse financiera y militarmente. Mientras tanto, a nuestros policías los asesinan en todo el territorio.
Finalmente, me intriga mucho cómo puede uno gobernar una ciudad como la suya, que es bien compleja, y un departamento como el suyo, a pesar de las excelentes relaciones con el gobernador, sosteniendo tan malas relaciones con el Gobierno Nacional, porque es sabido que el Presidente a usted lo detesta…
Luego de los resultados de las elecciones de octubre del año pasado, seguro el Presidente tomó la decisión de hacer hasta lo imposible para que nos vaya mal a los gobernantes locales y regionales. Pero hoy hay un contraste grande, en términos de ejecución en las regiones versus lo que pasa en el orden nacional. Ellos no ejecutan, nosotros sí. Ahí es donde yo insisto en la responsabilidad que tenemos varios de nosotros, yo desde Medellín, Galán desde Bogotá, Eder desde Cali, Álex desde Barranquilla, Dumek desde Cartagena, Beltrán desde Bucaramanga, Rojas desde Manizales; todos tenemos una responsabilidad grande, porque es que al país lo sacamos adelante desde las regiones. Y eso hacemos. Por ejemplo, mientras en el país frenan las obras de infraestructura, nosotros aquí dispusimos de un presupuesto de 6,3 billones de pesos, solo en Medellín, para infraestructura; 1,2 billones de pesos para infraestructura educativa; más de 600.000 millones de pesos para infraestructura deportiva, que nos dejaron destruida. Empezaremos la construcción de otra línea del metro como es el corredor de la 80, con una inversión cercana a los 5 billones de pesos. Estamos sacando adelante Hidroituango. En los próximos días comenzará la construcción de la segunda etapa del túnel de Oriente a Medellín que durará 2, 3 años y tendrá una inversión de 2 billones de pesos del sector privado, sin un solo peso del público. Ya en el tramo del túnel del Toyo, Medellín ha invertido casi 700.000 millones de pesos y la gobernación, casi 2 billones. No nos vamos a quedar cruzados de brazos mientras el Gobierno Nacional quiere frenar cosas u obstruir las regiones. Aquí no nos estamos quejando, estamos trabajando. Aquí no vivimos preocupados, aquí vivimos ocupados.
¿Qué es lo que usted le está ofreciendo al Gobierno con respecto a Afinia? ¿Venderle la empresa o entregársela, por las pérdidas que produce?
Esto necesita una salida integral. Ya vimos lo que le pasó a Air-e. No queremos que se genere un apagón en la Costa.
La peor decisión que ha tomado EMP en muchas décadas la tomaron en el gobierno anterior: entrar a operar el sistema eléctrico en cinco departamentos de la Costa, sin tener todas las garantías. EPM le ha invertido más de dos billones de pesos, pero lo único que le representa Afinia son pérdidas. Con todo eso no se ha interrumpido el servicio y se ha invertido en mejoras de calidad. Pero pone en riesgo a EPM y al Distrito de Medellín porque pone en riesgo las transferencias de EPM. Esto necesita una salida integral. Ya vimos lo que le pasó a Air-e. No queremos que se genere un apagón en la Costa. Sí estamos buscando una salida dialogada con el Gobierno y ojalá con mandatarios de la Costa. Y si el Gobierno está dispuesto a comprar las acciones de EMP en Afinia, nosotros estamos dispuestos a ello.
Pero en las últimas horas se andaba hablando de una supuesta alianza suya con Gustavo Bolívar…
Aliados en nada. Son temas de gobierno. Con Gustavo Bolívar hemos tenido grandes diferencias en cómo vemos el país. Ellos ven un país muy distinto a la mayoría de colombianos. Otra cosa es que al ser el director del DPS sostuvimos una reunión técnica muy cordial en Medellín para explorar tres temas fundamentales: el programa de ‘Cero hambre’, el de ‘Parceros’ para jóvenes vulnerables y el del adulto mayor. Ojalá aterricen los recursos del orden nacional.
Usted fue uno de los principales damnificados de los llamados
‘petrovideos’. Los planes que descubrieron contra usted por parte de las cabezas de la campaña Petro eran muy malucos. Querían imprimirle una imagen de pervertido y no sé de qué más cosas. ¿En qué etapa están las denuncias que usted ha puesto ante la justicia?
Lo que terminaron demostrando los ‘petrovideos’ es que así son ellos desde el punto de vista personal. Siempre he sostenido que si usted no es buena persona, no puede ser buen gobernante. Casi que uno podría decir que Colombia está siendo gobernada por malos seres humanos, por personas que quieren destruir al otro, que no respetan la diferencia y que, a través de la mentira, justamente construyeron unos relatos para que, costara lo que costara, ganaran las elecciones y el poder.
Sí, había que correr la línea ética…
¿Qué significa eso? Que había que mentir sobre mí y sobre muchas otras cosas. Y a eso fue a lo que se dedicaron. Esas ‘bodegas’ petristas siguen activas y gastan miles de millones de pesos. Pero mire lo que es la vida. Los que hicieron las cosas mal hechas para obtener el poder hoy posan de víctimas, asegurando que va en marcha un golpe de Estado porque el CNE está investigando los topes de la campaña Petro. Por eso hago un llamado a rodear a las altas cortes. Mire ya los ataques de los cuales están siendo víctimas.
Pues a varios magistrados los tienen chuzados…
Los han convertido en víctimas. Pero Colombia saldrá adelante con más fuerza, con más vigor, se reactivará la economía cuando vuelva la confianza, siempre y cuando estemos preparados para el 2026.