En varios países alrededor del mundo, es común ver cómo las personas antes de entrar a cualquier lugar suelen retirarse los zapatos y dejarlos en la puerta, con el fin de evitar ingresar la suciedad del exterior. También es considerado como un símbolo de respeto y humildad en ciertas culturas.
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En ese sentido, la guardería Gosho Kodomo en la ciudad de Koga (Japón), estuvo experimentando un inusual caso en el que los zapatos de los estudiantes empezaron a desaparecer de repente.
Dada la cantidad descomunal de zapatos perdidos, padres y profesores extrañados con la situación no dudaron en reportar el hecho con la policía local, quienes pensaron que había un ladrón suelto en el jardín infantil.
El cuerpo de policía decidió instalar tres cámaras de seguridad en diferentes puntos del establecimiento, desde los que se veían las entradas, para poder identificar a la persona que se estaba llevando los zapatos de los menores.
Tras una espera paciente, cuatro días después las autoridades dieron con el responsable del robo, pero no podían creer lo que grabaron las cámaras. Una curiosa comadreja intentaba escapar rápidamente con un zapato blanco en su boca.
Al parecer el animal se habría estado llevando durante varios días los zapatos que contaban con un interior de lona, ya que estos al ser más livianos le facilitaban el transporte hasta su escondite.
De acuerdo con la policía de Kasuya, la comadreja alcanzó a robar cerca de 21 pares, especialmente los de color blanco. Entre risas la comunidad encontró los zapatos y agradecieron que no se tratará de una persona.
Perrito cocker frustró robo en la localidad de Bosa | El Tiempo
STEPHANY GUZMÁN AYALA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL