Campesinos partidarios de Evo Morales anunciaron una tregua de 72 horas a partir de este miércoles en los bloqueos viales que iniciaron hace 24 días en Bolivia, en rechazo al gobierno y en apoyo al expresidente, investigado por la justicia.
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"Estamos haciendo una pausa con vigilia por 72 horas", señaló Humberto Claros, secretario General de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, en una declaración transmitida por la radio Kawsachun Coca, ligada a Morales.
Según el dirigente, los manifestantes suspendieron temporalmente la protesta por "razones humanitarias".
Claros mencionó que tienen "cuatro muertos" entre sus filas a causa de los enfrentamientos con la policía, que ha intentado despejar las vías con apoyo de los militares desde el pasado viernes.
Sin embargo, el gobierno desmintió la versión sobre los fallecidos, mientras la Defensoría del Pueblo aseguró a la Afp que no "tiene ninguna denuncia" de víctimas mortales durante los choques en los puntos de bloqueo.
por lo menos de 100 heridos y más de 200 detenidos del movimiento de protesta
Claros, entretanto, también dio cuenta "por lo menos de 100 heridos" y "más de 200" detenidos del movimiento de protesta.
El ministerio del Interior maneja un balance de 127 heridos, 92 de ellos policías, y alrededor de 180 detenidos.
La suspensión temporal de los bloqueos coincide con los operativos de la fuerza pública para liberar las carreteras tomadas por los campesinos.
"Hemos logrado reducir a su mínima expresión los bloqueos en nuestro país", dijo este miércoles el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, en conferencia de prensa.
La estatal Administradora Boliviana de Carreteras reportó este miércoles seis puntos viales obstruidos en el centro de Bolivia, principalmente en el departamento de Cochabamba, contra una veintena que había en pasados días.
El viernes Morales llamó a declarar una tregua en las manifestaciones y desde el viernes cumple una huelga de hambre, para presionar por un diálogo con el gobierno de su exministro Luis Arce.
La protesta inició en defensa del exmandatario de 65 años ante lo que sus seguidores consideran una "persecución judicial" por la investigación penal que enfrenta por el abuso de una menor que él niega y que presuntamente habría ocurrido en 2015, cuando ejercía la presidencia.
Sin embargo, los campesinos e indígenas ahora protestan por la crisis económica derivada de la escasez de divisas que afecta principalmente la importación de combustibles que el Estado boliviano distribuye de manera subsidiada.
Morales y el presidente Arce libran un pulso por el control de la izquierda gobernante y la nominación presidencial para las elecciones de 2025.