América reinventa la rotación (opinión)

Es un concepto simple pero arriesgado: rotar en un equipo es repartir la carga física y mental de una campaña agotadora no en 11 titulares sino en 30 inscritos (o 35 cuando hay torneos internacionales), buscando no solo equidad en el esfuerzo y la recuperación sino motivación y competencia en la totalidad de la plantilla para casos de emergencia como lesiones, suspensiones o físico cansancio.

Pero todo eso lo está revaluando el América de Cali, que se aplicó el 70 por ciento de sus partidos de Liga y Copa hasta finales de octubre prácticamente con una sola nómina tipo, que cuando empezó a lanzar alertas sobre la necesidad del descanso se estancó, sumó 7 partidos sin ganar y pasó del súper invicto a sonoras derrotas contra Junior (3-1), Cali (0-1) y Pasto (3-1).

Entonces vino la rotación por dictadura: el técnico ‘Polilla’ Da Silva empezó a hacer notar lo que seguramente ya sabía, que era la necesidad de aliviarles cargas a sus figuras, y se fue a Pasto con 11 nuevos que buscaban, en modo Rambo, convencerlo en una sola oportunidad. Así les fue.

Porque rotar no es improvisar, es calcular los riesgos, integrar elementos por dosis y no por oleadas, darles a los habituales las alternativas de los novatos y encontrar soluciones para cuando vengan rachas como la que se sufre hoy. La suerte es que ya había cupo asegurado a los cuadrangulares. Pero ¿a qué costo?

Los objetivos a los que debería apuntarle América

Por eso si América tiene que elegir ahora debe ir por los títulos y no por puntos invisibles que, en una campaña sin trofeos, es solo sombras, promesas incumplidas, quimeras.

Vaya por lo suyo, profe Polilla, que nadie recuerda gestas sin títulos. Busque la Copa con determinación, asegure para su empleador un torneo internacional y métale trabajo a facturar al menos 1 millón de dólares que le garantizará la fase de grupos. Y después, si es que logra dosificar esfuerzos y aliviar las piernas de los más agotados, vaya de frente por el título de Liga, que con los 3 millones de dólares de esa clasificación a Libertadores no tiene pierde: ¡se va a quedar en Cali!

Compre tranquilidad para decidir, para rotar como usted lo decida y no como se lo sugieran los mismos notables que entorpecieron antes tantos procesos exitosos. Garantice la lealtad de los suyos por la vía de la coherencia entre lo que les dice y lo que hace. No lo olvide: no hay mejor escuela que el ejemplo y si no fuera usted quien tomara de manera autónoma e independiente las decisiones, esa erosión de la confianza de su plantilla será pronto un mal incurable.

Opinión

JENNY GÁMEZ

Editora de Futbolred

@JennyGamezA

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