A Santa Fe le llegó el peor partido del 2024 en el peor momento, en el comienzo de los cuadrangulares semifinales de la Liga BetPlay, contra uno de los rivales más duros del grupo, Atlético Nacional, y el mismo día que Millonarios comenzó con triunfo. El 4-0 más inoportuno en mucho tiempo.
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El equipo de Pablo Peirano la pasó mal contra la mejor versión del Nacional de Efraín Juárez, que acabó expulsado en la que, tal vez, fue la única mancha de una noche redonda para el verde, que hoy amanece como líder de su zona.
La expulsión que echó por tierra el planteamiento de Santa Fe
A Santa Fe se le complicó el partido muy rápido: A los 6 minutos ya tenía un jugador menos, por una fuerte entrada de Marcelo Ortiz a Marino Hinestroza que el árbitro Diego Ulloa inicialmente castigó con amarilla, pero que luego el VAR le hizo cambiar por roja. Ahí se le vino la noche.
Nacional pasó de largo contra un equipo que mostró una debilidad nunca vista a lo largo del año. A los 26 minutos, Andrés Sarmiento aprovechó un servicio de Andrés Felipe Román y abrió el chorro.
Recuerden que ya había un antecedente entre el mexicano y Pablo Peirano en el partido de la fase todos contra todos. El partido duró parado un par de minutos y Ulloa expulsó a Juárez, que se fue aplaudiendo a la tribuna.
Luego de la expulsión del DT por su celebración, Nacional siguió de largo. Y, aunque se quedó con 10 jugadores por la expulsión de Juan Felipe Aguirre por doble amonestación, a los 41, en la última jugada de la primera etapa Sarmiento tomó un rebote y consiguió el 3-0.
Mala suerte de Santa Fe en el segundo tiempo: dos palos y un autogol
Santa Fe lo intentó, metió dos tiros en los palos en el segundo tiempo, pero hasta la mala suerte se ensañó con el león: Edwar López intentó rechazar un balón en un tiro de esquina y acabó metiendo el balón en su arco, a los 69.
Y luego, Joan Castro conectó de cabeza tras un centro de Pablo Cepellini y concretó la goleada, a los 89. Fue el mejor partido de los verdes en el semestre y el peor de los rojos, en el momento más inoportuno del campeonato.
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