El derbi entre Real Madrid y Atlético, en el que está en juego la punta de la Liga española, ha estado marcado, desde los días previos, por polémicas arbitrales.
El club blanco se había quejado formalmente del trabajo de los árbitros a raíz de lo sucedido en la fecha pasada en el partido que Real Madrid perdió con el Espanyol.
Ese día, el VAR no dijo nada acerca de una fuerte entrada de Carlos Romero a Kylian Mbappé, que ameritaba tarjeta roja.
El encuentro de este sábado 8 de febrero concluyó 1-1.
La protesta del Real Madrid antes del derbi
"Los hechos ocurridos en este encuentro han sobrepasado cualquier margen de error humano o de interpretación arbitral", denunció el Real Madrid en su escrito, en el que se también se quejó por el gol anulado a Vinícius.
"Lo sucedido en el RCDE Stadium representa la culminación de un sistema arbitral completamente desacreditado, en el que las decisiones en contra del Real Madrid han alcanzado un nivel de manipulación y adulteración de la competición que ya no puede ser ignorado", agregó el club blanco.
Para agregar sal a la herida, este sábado a Real Madrid le pitaron su primer penalti en contra en toda la temporada, justo en el derbi contra el Atlético.
La jugada ocurrió cerca del final de la primera etapa, cuando el VAR llamó al juez central del partido, César Soto, para revisar un pisotón de Aurelien Tchouameni a Samuel Lino.
Soto dio el penalti y Julián Álvarez, picando la pelota ante el esfuerzo de Thibaut Courtois, puso en ventaja al Atlético de Madrid en el Bernabéu, en el minuto 35.
La jugada despertó nuevamente la polémica arbitral. Sin embargo, en el Atlético le dieron la derecha al juez. "Al final es pisotón, no sé si es voluntario pero es pisotón y es penalti", dijo Javi Galán al final del primer tiempo.
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