Este no era un partido para regalar puntos. Mucho menos cuando el rival, el Unión Magdalena, jugaba con 10 desde el minuto 17. Empatar hubiera sido amargo para Santa Fe dadas las circunstancias, pero el gol finalmente llegó, solo uno, pero suficiente. Omar Albornoz se encargó de anotar y el león se fue de Santa Marta ganador, satisfecho y es líder parcial.
No fue un partido brillante. Santa Fe estaba nublado. No encontraba una gota de claridad. Ni antes de la expulsión ni después.
Fue al minuto 17 cuando Unión dio ventaja. Mera pegó en el tobillo de Frasika, pegó y se hizo el que no fue, como si no fuera tan duro mientras el jugador cardenal se revolcaba en el pasto. El árbitro, tras llamado del VAR que lo alertó, le sacó la tarjera roja. Eso cambió todo el plan del Unión, que no sabía cómo afrontar el resto del partido, ante un Santa Fe que tampoco lo sabía.
Si Santa Fe pensó que de ahí en adelante la victoria iba a ser sencilla, se equivocó. No por méritos del rival, sino por su propia confusión. Sus remates eran escasos, sin ningún peligro. La primera parte se pasó sin emociones. En un palco, Jorge Bava, el nuevo entrenador, miraba con preocupación cómo su nuevo equipo naufragaba en Santa Marta.
El descanso fue necesario para recuperar fuerzas y estrategia. El DT encargado, Francisco López, tenía la misión de hacer otro milagro de los que ya ha hecho. Santa Fe aceleró en la segunda parte, sabía que empatar de visita ya no era el mejor escenario. No podía dejar escapar esa victoria que era tan probable y que lo ponía en la punta. Albornoz, recién ingresado, empezó a intimidar con sus remates y su desborde sobre la zona derecha. Rodallega tuvo el gol en su nariz, y su narizazo mandó la pelota afuera.
El gol de la victoria de Santa Fe
Santa Fe no era dueño del balón y mucho menos del partido. Y quizás el Unión se entusiasmó, pensó que podía buscar una gesta, ganar con 10. Y fue justo ahí cuando Santa Fe sacó las garras.
Al minuto 66 elaboró una buena jugada. Fue un contragolpe veloz y letal. Unión era el que atacaba, y en cuanto el equipo rojo recuperó el balón, necesitó un par de pases para llegar al área rival. Frasika comandó al contraataque. Llegó a predios del Unión, buscó el ángulo de tiro, no lo encontró. pero vio que su compañero Albornoz llegaba solo y le pedía a gritos la pelota. Lo oyó. Lo miró. Y se la tocó. Albornoz no desaprovechó el pase, sacó un remate rastrero y la pelota fue a la red, 0-1 y eso fue todo.
Santa Fe ya había hecho su trabajo. Quedaba esperar que el tiempo de agotara para celebrar una nueva victoria. Llegó a 22 puntos y es el líder parcial de la Liga. Santa Fe no gustó, pero ganó. Le toca ahora a Bava hacer que siga ganando y que guste.
PABLO ROMERO
DEPORTES
@PabloRomeroET