Reconocida cadena de restaurantes de pollo frito gourmet anunció su cierre definitivo tras declararse en quiebra

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Sticky’s Finger Joint no resistió la presión financiera y cesa sus operaciones en Estados Unidos.

PERIODISTA16.05.2025 08:27 Actualizado: 16.05.2025 08:40

Sticky’s Finger Joint, reconocida por su concepto de pollo frito estilo gourmet y sus salsas artesanales, anunció el cierre definitivo de todas sus tiendas en Estados Unidos.

La compañía, fundada en 2012 en Nueva York, confirmó que se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras estadounidense, iniciando un proceso de reestructuración financiera.

La empresa alcanzó notoriedad por su propuesta diferenciada en el mercado del pollo frito, destacándose con platos como el Bacon Mac Sandwich y papas con miel picante.

Con más de 20 locales en Nueva York, Nueva Jersey y Pensilvania, Sticky’s experimentó un crecimiento veloz que, con el tiempo, resultó difícil de sostener.

En un comunicado citado por 'La FM', la compañía explicó que la decisión de cesar operaciones llega tras “largos esfuerzos por estabilizar operaciones, refinanciar deudas y atraer inversionistas estratégicos”, sin éxito.

Factores que llevaron a la quiebra

De acuerdo con lo dicho por la compañia, varios factores contribuyeron al colapso financiero de Sticky’s Finger Joint:

Altos costos operativos, especialmente en zonas urbanas como Manhattan.
Impacto prolongado de la pandemia de COVID-19, que redujo significativamente el tráfico de clientes.
Dificultades para competir en el mercado del servicio a domicilio, esencial en el entorno pospandemia.
Inflación en ingredientes clave, como pollo y aceite.
Competencia intensa de cadenas consolidadas como Chick-fil-A y Shake Shack.
Disminución sostenida en las ventas desde 2022.

A pesar de haber vendido más de 11 millones de porciones de pollo y contar con una clientela fiel, la marca no logró sostener su modelo de negocio frente a estos desafíos.

Qué ocurrirá con los locales y los empleados

Algunos puntos de venta permanecerán abiertos temporalmente para liquidar inventarios y gestionar un cierre ordenado.

Según fuentes internas citadas por medios internacionales, se está evaluando la posibilidad de vender activos o incluso la marca, aprovechando su reconocimiento en el noreste de Estados Unidos.

El cierre impacta directamente a cientos de trabajadores. Aunque la empresa expresó su intención de garantizar las compensaciones correspondientes, la situación legal derivada del proceso de bancarrota podría retrasar o dificultar dichos pagos.

El fin de una marca icónica del pollo gourmet

El caso de Sticky’s Finger Joint refleja los desafíos actuales en el sector de la restauración, especialmente para propuestas de nicho que dependen de ingredientes de calidad y ubicaciones de alto costo.

A pesar de su originalidad y su éxito inicial, la empresa no logró adaptarse al entorno económico cambiante.

“Hicimos todo lo posible por mantener la marca a flote, pero las circunstancias económicas simplemente nos superaron”, declaró un portavoz de la empresa en el comunicado oficial.

*Este contenido fue escrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de conocimiento público divulgado a medios de comunicación. Además, contó con la revisión de la periodista y una editora.

JOS GUERRERO

EQUIPO ALCANCE DIGITAL