Real Madrid humilló a Manchester City en la Champions, de la mano de un imparable Kylian Mbappé

Por lo visto en la cancha, el uno por ciento de posibilidades que tenía el Manchester City de darle vuelta a la serie contra el Real Madrid, porcentaje anunciado por el propio técnico del club inglés, Josep Guardiola, resultó exagerado: Real Madrid humilló a su rival, lo venció 3-1 y lo hizo ver muy mal, antes de eliminarlo de la Liga de Campeones. 

El club blanco, siempre de romance con esta competición, aprovechó una noche mágica de Kylian Mbappé, al que le bastaron 77 minutos en la cancha para destrozar la defensa del City, anotar su primer triplete vestido de blanco en la Champions y poner a su equipo en el sorteo de la siguiente fase del torneo, donde podría encontrarse con Atlético de Madrid o Bayer Leverkusen. 

Real Madrid acabó con los planes del City en cinco minutos

Antes de que Mbappé volviera a mostrar sus mejores formas, Guardiola sorprendió al dejar por fuera de la alineación a dos de sus figuras, el noruego Erling Haaland y el belga Kevin de Bruyne, seguramente, con la idea de quitarle la pelota al Madrid y así comenzar a buscar la remontada tras el 2-3 de la ida en su estadio. 

Cualquier plan que tuviera Pep estalló en mil pedazos en solo cinco minutos, cuando Real Madrid aprovechó todo el espacio que dejó una defensa adelantada: Raúl Asencio sorprendió a la zaga con un pase desde el fondo y Mbappé lo recibió para bañar al portero Ederson Moraes, en una definición brillante: 1-0. 

Ya la diferencia en el global era de dos goles y con eso, Manchester City no se volvió a levantar jamás. Y a los 33, Mbappé lo remató con otra genialidad. Rodrygo le puso la pelota en el área y allí, el francés tiró un hermoso enganche para dejar libre el camino hacia la portería, con un disparo certero: así llegó el segundo gol blanco.

Manchester City, entregado y sin reacción

Guardiola no tuvo reacción. Además de su decisión de dejar a las figuras afuera, había perdido por lesión a John Stones, a los 8 minutos. No hubo soluciones, ni en la cancha ni afuera. 

Real Madrid, en cambio, aprovechó todas esas dudas para ampliar la ventaja, a los 16 del segundo tiempo, cuando Mbappé volvió a vencer a Ederson con un remate cruzado desde el borde del área, tras un pase de Federico Valverde. 

Solo a los 32 de la segunda etapa, y ya con tres adentro, Pep se atrevió a tocar la nómina, pero algo se rompió por dentro. Apostó por Mateo Kovacic y James McAtee, que en otras circunstancias, seguramente, no habrían sido la primera opción. 

En cambio, del lado blanco había tiempo para guardar piezas para lo que viene. Un minuto después de los cambios del City, Mbappé se fue ovacionado desde todas las tribunas del Bernabéu, para la entrada de Brahim Díaz, uno de los héroes del partido de ida, y para refrescar la mitad del campo con el ingreso de Camavinga por Dani Ceballos.

El argentino Nico González anotó el tanto del honor del City en una de las últimas jugadas del partido, a los 90+2, en un rebote tras un cobro de tiro libre, pero eso no tapa la superioridad del equipo de Ancelotti en este juego. 

Real Madrid sabe cómo jugar esta competición, y más cuando son llaves de eliminación directa. Ya dejó atrás el susto de no quedar entre los ocho primeros de la fase anterior, lo que lo obligó a ir a esta doble confrontación que, seguro, no estaba en los planes. Pero a estas alturas, la Champions es a otro precio. 

José Orlando Ascencio

Subeditor de Deportes

@josasc

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