Probablemente, usted conozca a alguna persona que se muerda las uñas a diario, por lo que este comportamiento se volvió tan común que comenzó a ser estudiado por la psicología. Los especialistas llegaron a la conclusión sobre qué significa esta práctica para una persona y tiene varios motivos.
Desde una perspectiva psicológica, morderse las uñas suele estar asociado con ansiedad, estrés o tensión emocional, más comúnmente conocido como onicofagia. Muchas personas lo hacen como una forma inconsciente de calmarse ante situaciones que les provocan nerviosismo o aburrimiento.
Este comportamiento repetitivo puede volverse automático y difícil de controlar, especialmente en momentos de tensión o presión. De acuerdo con un informe compartido por PubMed Central, la onicofagia es una afección crónica de naturaleza compulsiva, que se observa principalmente en niños y adultos jóvenes.
Además, destacaron la importancia de combatir este hábito: “Las complicaciones de la mordedura de uñas crónica y compulsiva van desde una distorsión evidente del lecho ungueal hasta infecciones ungueales y orales”. Por otro lado, también influye la salud dental en las mordeduras de las uñas, perjudicando, no solo a las uñas, sino también a la dentadura, ya que las manos están expuestas a más suciedad.
Comerse las uñas puede ser una mala costumbre Foto:Istock
La importancia que tienen las uñas en el cuerpo humano
De acuerdo con Medline Plus, si bien las uñas pueden parecer algo poco importante respecto a otras partes del cuerpo, esto no es tan así. Las uñas están formadas por queratina, una proteína resistente que protege las terminaciones de los dedos de manos y pies, sirviendo como una barrera natural contra los posibles golpes y traumatismos.
La salud de las uñas está estrechamente ligada al bienestar integral del cuerpo. Uñas frágiles, con manchas, surcos o cambios de color pueden ser señales tempranas de anemias, deficiencias de hierro o incluso de trastornos hormonales. Esto puede deberse a la falta de hierro o no consumir las suficientes vitaminas, proteínas o minerales.