El psicólogo estadounidense Daniel Goleman define que la inteligencia emocional es “como la capacidad de motivarnos a nosotros mismos, de perseverar a pesar de las frustraciones, de controlar los impulsos, de regular nuestros propios estados de ánimo y de empatizar y confiar en los demás”.
Conforme a los criterios de
Partiendo de esta definición general del concepto, el psiquiatra Enrique Rojas a través de sus redes sociales abordó este tema y logró encontrar cuáles son los aspectos que resaltan en una persona que posee esta capacidad.
Para esto inicia aclarando que: “La educación emocional comienza por conocerse uno a sí mismo. Saber las aptitudes y las limitaciones que uno tiene”. Sin embargo, poder reconocerse como alguien emocionalmente inteligente no es una tarea fácil, pero Rojas asegura que podrá hacerlo de manera más sencilla si tiene en cuenta cinco cualidades en específico.
Si usted desea averiguar si posee esta capacidad, debe realizarse cinco cuestionamientos sencillos a sí mismo. A partir de cada uno de ellos, haga una reflexión y póngalos en práctica en su vida si espera convertirse en alguien con inteligencia emocional.
¿Se conoce a sí mismo?
Según lo explica el psiquiatra, el primer aspecto que permite reconocer a una persona con un alto nivel de inteligencia emocional es el conocimiento que tenga sobre sí mismo. Para poder alcanzar dicha capacidad, debe ser consciente de usted mismo y tener facilidad al expresar sus emociones.
De esta manera, usted da a entender que posee la habilidad de reconocer y entender sus propios sentimientos y también los efectos que estos tienen en su manera de comportarse e interactuar con los demás. Si usted no tiene construida de manera adecuada una autoconciencia, se le dificultará desarrollar otras habilidades emocionales.
¿Puede dominar sus impulsos?
Rojas hace una aclaración importante en que no basta solo con reconocer sus sentimientos, lo más importante es saber gestionarlos. Es así que plantea el segundo punto en su lista de cualidades y consiste en el dominio de los impulsos y una correcta gestión de la ansiedad.
A esto se le conoce como autorregulación. Poseer inteligencia emocional le permite hacer un manejo efectivo de sus emociones y así puede desarrollar una habilidad para afrontar la ansiedad impidiendo que ésta controle sus acciones.
Esto también le ayudará a disminuir los niveles de estrés en su vida, mejorando su capacidad para tomar decisiones, lo que contribuye a un fortalecimiento de sus vínculos y en un futuro eso será positivo para su autoestima.
¿Es optimista?
El experto asegura que el tercer punto de su lista es la capacidad de mantenerse optimistas, lo que le permite a las personas perseverar incluso tras las adversidades. Hace una fuerte aclaración de que el optimismo no significa esperar que las cosas mejoren, sino es el hecho de ver oportunidades incluso en momentos de complicación.
Cuando se es positivo en la vida, la mente está configurada a percibir cada uno de los contratiempos que se pueden presentar como algo controlable y temporal en la vida, de esta manera le ayuda a salir adelante hallando las soluciones adecuadas frente a cada situación.
¿Confía en los demás?
Rojas asegura que la cuarta cualidad que resalta en una persona que posee un alto nivel de inteligencia emocional es el tener empatía y confianza en los demás.
La empatía lo que hará será permitirle una mejor conexión con los otros, mientras comprende de manera adecuada sus emociones y así pueden crear vínculos más profundos. La confianza es un punto clave en este proceso, pues le permite construir vínculos más saludables.
¿Sabe adaptarse?
Para finalizar, el experto asegura que una persona que es inteligente emocionalmente tiene la capacidad de adaptarse a los diferentes puntos de vista de los otros, lo que también demuestra que tiene un buen desarrollo de sus habilidades sociales.
Aprender a considerar la perspectiva del otro como algo válido, le ayuda a encontrar soluciones efectivas para cada una de las personas involucradas y así podrá desenvolverse en otras situaciones de la vida sin miedo.
De esta manera usted podrá encajar mejor en cualquier tipo de entorno y se sentirá conectado a las personas que le rodean con facilidad.
ERIKA LUCIA IBAÑEZ GARCIA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO