Cada vez son más los profesores y académicos que comparten en redes sociales sus métodos de enseñanza, estudios realizados y hasta vivencias diarias. Las más utilizadas por los docentes suelen ser Instagram y TikTok.
Gerard Alarcón es uno de los tantos fenómenos digitales. Este profesor español, además de las redes, se dedica a enseñar en una escuela de educación especial en Barcelona.
A través de estas plataformas, bajo el nombre ‘Maestro de Colegio’, ha logrado construir una comunidad de más de dos millones de personas a las que brinda consejos y cuenta momentos graciosos que le ocurren en su labor diaria.
En su más reciente publicación, sorprendió a sus seguidores con una recopilación de correos electrónicos que ha recibido de los padres de sus alumnos y añade en tono de broma: “Vais a alucinar con los mensajes que nos han mandado”.
Los inesperados mensajes que recibe el profesor
El primer mensaje que lee Alarcón trata sobre la hora de los descansos. Una madre le pide que adelante la hora de comer de 11 a. m. a 10:30 a. m. porque su hijo siempre tiene hambre. “No quiero que pase hambre. Gracias”, es la oración con la que termina la primera solicitud de un padre de familia.
“Bueno, pues claro. Y si hace falta, le montamos una mesa con el mantel y unas velas para que coma”, dice con sarcasmo el profesor.
El segundo texto que recibe fue una solicitud para cambiar su forma de calificar: “Le agradecería que no use bolígrafos rojos al corregir los exámenes de mi hijo. El rojo es un color muy agresivo y le genera ansiedad. ¿Podría corregir en rosa, pastel o verde agua?”, lee y contesta de forma burlesca: “Claro y con purpurina, no vaya a ser que el examen ataque”.
Por último, comparte un mensaje en el que un acudiente manifiesta que la felicidad de su hija es lo más importante. “Ayer mi hija llegó triste porque le puso un cinco en un trabajo. Como su felicidad es lo más importante para mí, le pido que le suba la nota. Gracias”.
A este correo responde con un simple “Vale”, cargado de indignación y hace un gesto de candado sobre su boca, lo que indica que no tiene nada más que decir.
MARIANA SIERRA ESCOBAR
EQUIPO ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO