Presidente Gustavo Petro le apostó al pragmatismo con la nominación de Gregorio Eljach a la Procuraduría

La designación de Gregorio Eljach, secretario del Senado, como ternado por la Presidencia para el cargo de procurador fue sorpresiva, más no inesperada. El gobierno de Gustavo Petro ya venía planteando esta posibilidad desde hace unas semanas, como lo confirmaron fuentes cercanas al Ejecutivo y el Pacto Histórico.

Desde hace meses se sabía la estrategia del Ejecutivo en esta elección. Contrario a lo que ocurrió en el proceso de elección de la cabeza de la Fiscalía, el mandatario se iba a garantizar una persona completamente afín para llegar al Ministerio Público. Así lo confirmaron miembros del Gobierno en su momento.

En ese sentido, el Ejecutivo esperó a que el Consejo de Estado y la Corte Suprema de Justicia definieran a sus ternados. Mientras tanto se inició una convocatoria por el Ejecutivo para elegir a su candidato. Sin embargo, no era vinculante, pues no estaba reglada por la normativa colombiana.

De esta forma, cuando se materializaron las otras dos candidaturas, el Ejecutivo evaluó sus posibilidades de éxito. Ante dos aspirantes que son interpretados como contrarios al gobierno de Gustavo Petro, el Ejecutivo se movió para garantizar que su aspirante tuviese posibilidades de ganar en la elección del Senado.

Ninguno de los aspirantes de su convocatoria tenía esas posibilidades, por lo que desde el Pacto Histórico propusieron que Gregorio Eljach fuera el nominado por parte del Ejecutivo. Este ya se había inscrito en la convocatoria de la Corte Suprema, pero el alto tribunal prefirió a Germán Varón Cotrino.

Eljach no es intrínsecamente cercano al gobierno Petro, pero era un perfil deseado frente a otros aspirantes que se veían con posiciones contrarias al actual mandatario. Por eso, al confirmarse que no iba a ser el nominado del alto tribunal, desde el Ejecutivo se movieron para presentarlo como su ternado.

Con esta designación, el gobierno Petro toma el liderazgo para poner un afín en la Procuraduría, o al menos alguien que no le sea contrario. Eljach parte con la ventaja de ser el secretario del Senado, que le granjea un amplio reconocimiento y recepción entre todos los sectores políticos.

La lectura que hacen los expertos es que “el Presidente le apostó al pragmatismo político”, como señala el profesor Juan Federico Pino, de Flacso Ecuador. El académico agregó: “Los otros dos candidatos tienen una agenda muy clara para las elecciones de 2026 y pueden convertirse en antagonistas”.

En esa línea también estuvo el profesor Yann Basset, de la Universidad del Rosario: “Es en respuesta a un perfil de candidatos que son contrarios. El presidente Petro responde en esa dirección de poner un perfil político, no asociado a la izquierda”.

Los dos académicos coincidieron en la ventaja que tiene Eljach en cuanto as las relaciones que ha gestado en un Senado durante sus muchos años como secretario: “Es alguien que por su función tiene muchas relaciones políticas”, indicó Basset.

“Es un pulso político de un candidato afín a todo el mundo para tratar de bloquear la movida de poner la Procuraduría a alguien de la oposición”, señaló Basset. “No busca una Procuraduría afín, pero que tampoco lo obstaculice. Petro fue pragmático y sabe que Eljach conoce el senador y se ha ganado la tolerancia de distintos sectores”, complementó Pino.

Los cuestionamientos a la movida

Sin embargo, no es una movida libre de polémica. “Petro reduce más su papel de ser el cambio y afecta su discurso contra la clase política porque se está aliando con ella”, apuntó el profesor Pino.

Esta postura también fue expuesta por la senadora Angélica Lozano. “Se le informa a los 26 preseleccionados por la Presidencia y la ciudadanía que mandó oportunamente sus comentarios que quedaron mamando”, indicó la congresista de la Alianza Verde, que consideró que fue una pérdida de tiempo el ejercicio de invitar a postularse: “la convocatoria de Presidencia para la Procuraduría, a la caneca”.

El analista Gabriel Cifuentes también expresó sus reservas a la acción. “Lo mismo de siempre, así salgan bodegas a aplaudir y justificar, no sería sino otra muestra del todo vale. Sería lamentable”.

El investigador y experto constitucionalista Rodrigo Uprimny fue otro de los críticos de la movida presidencial. Este cuestionó los perfiles políticos que aspiran a la Procuraduría. “Ahora el presidente pone a otro político en la terna para dirigir la Procuraduría, con lo cual queda una terna de tres políticos pura sangre. Clara e indebida politización de los órganos de control”, comentó.

JUAN SEBASTIÁN LOMBO DELGADO

Redacción Política