¿Por qué olvidamos los sueños? Estudio lo explica

a muchas personas les ha sucedido que experimentan un sueño fascinante del cual no quieren despertar, y en algunos casos, incluso se encuentran con personas queridas que ya no están con ellos. 

Sin embargo, al despertar, la mayor parte de esos sueños se disipa rápidamente. ¿Por qué ocurre esto? ¿Qué nos lleva a recordar solo fragmentos de nuestros sueños al despertar?

La fase REM y el olvido de los sueños

Según una publicación en Scientific American, es completamente normal que al despertar de un sueño vívido lo olvidemos en cuestión de minutos o incluso segundos. Esto ocurre porque los sueños se producen principalmente durante el sueño de movimientos oculares rápidos, conocido como fase MOR o REM (del inglés Rapid Eye Movement), aunque no exclusivamente en esta fase.

Deirdre Barrett, investigadora especializada en el sueño en la Facultad de Medicina de Harvard, aclara que durante el sueño REM, “las áreas del cerebro que transfieren los recuerdos al almacenamiento a largo plazo -así como las propias áreas de almacenamiento a largo plazo- están relativamente desactivadas”. Esto significa que el cerebro no está completamente preparado para guardar esos recuerdos en la memoria duradera.

La memoria de corto plazo en acción

Un estudio realizado en ratones y publicado en 2019 en la revista Science sugiere que esta desconexión de las áreas de memoria podría ser un efecto secundario del rol que tiene la fase REM en la consolidación de los recuerdos. 

En dicha etapa del sueño, las áreas responsables de la memoria a corto plazo permanecen activas, pero solo pueden retener los recuerdos durante unos 30 segundos. Por tanto, para poder recordar un sueño, es necesario despertar durante la fase REM, afirma Barrett. Si se avanza a la siguiente fase del sueño sin despertar, el contenido de ese sueño no llegará a almacenarse en la memoria a largo plazo.

El sueño REM ocurre en ciclos de aproximadamente 90 minutos, y se prolonga conforme avanza la noche. De acuerdo con Barrett, el primer ciclo REM de la noche dura solo unos pocos minutos, pero tras una noche de ocho horas de sueño, es común haber estado en esta fase por unos 20 minutos.

La relación entre el tiempo de sueño y la memoria de los sueños

La cantidad de horas que duerme juega un papel crucial en la retención de los sueños. Según la publicación, si solo dormimos seis horas, habremos tenido menos de la mitad del tiempo de sueño REM que tendríamos en una noche de ocho horas. Las últimas horas de descanso resultan ser las más relevantes para la actividad onírica, y es más probable recordar el último sueño justo antes de despertar.

ELIZABETH SANTANA

El Universal (México) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de El Universal, y contó con la revisión de un periodista y un editor.