A medida que se acerca el 10 de enero, cuando el nuevo presidente de Venezuela debe asumir un nuevo periodo, hasta 2031, Nicolás Maduro - cuyo triunfo no ha podido demostrar- no solo insiste en su juramentación sino en que la opositora María Corina Machado ya no se encuentra en el país.
Conforme a los criterios de
En varias oportunidades Maduro ha insistido en que Machado está en Panamá y Colombia. Lo reiteró este lunes en su programa de televisión “Con Maduro +” en el que aseguró que la opositora está en Colombia para “buscar dólares del narcotráfico”y así conspirar en contra del Gobierno chavista.
Machado ha insistido en que se encuentra en Venezuela desde la clandestinidad y que no abandonará el país, aún sabiendo los riesgos a los que se enfrenta.
María Corina sigue en Venezuela, es difícil que se vaya, pero tiene tres opciones y todas son difíciles: el exilio, la cárcel o en el peor de los casos, que atenten contra su vida
“María Corina sigue en Venezuela, es difícil que se vaya, pero tiene tres opciones y todas son difíciles: el exilio, la cárcel o en el peor de los casos, que atenten contra su vida”, dijo a EL TIEMPO una fuente de la oposición que prefiere el anonimato.
La fuente también cree que la insistencia de Maduro en decir que Machado está fuera del país busca desmotivar a los seguidores de la oposición, quienes con el exilio de Edmundo González a España, sintieron una gran decepción pero la confianza en la líder sigue alta.
Según la encuesta de octubre de la firma Meganálisis, el 80,9 por ciento de los venezolanos confía en Machado mientras que el 60,6 por ciento sigue confiando en Edmundo González.
“Si la gente confía en Machado, es obvio que Maduro continuará su estrategia de intentar desacreditarla. Él dice que huyó porque no sabe dónde está”, reitera la fuente consultada por este diario.
La amenaza que pesa contra Edmundo González si regresa a Venezuela
El Fiscal General de la República, Tarek William Saab, aseguró a la AFP que si Edmundo González llega a Venezuela perderá su libertad. “Él sabe que si entra a Venezuela es detenido de manera automática”.
La semana pasada Venezuela ratificó su pedido a Interpol de activar la alerta roja en contra del opositor, a lo que la organización respondió que este tipo de alertas no se emiten por persecuciones políticas.
Pero la amenaza sigue latente. “Hay un amigo mío que le tiene un comité de bienvenida, porque él dice que viene a juramentarse. Lo vamos a esperar en el aeropuerto”, afirmó hace unos días el ministro de Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, quien además convocó a una marcha para el 10 de enero en apoyo a la juramentación de Maduro.
¿Se mantiene la posibilidad de una resolución del conflicto venezolano por mecanismos políticos?
Esta pregunta la formulan los integrantes de la organización Laboratorio de Paz, quienes consideran que "las autoridades se preparan para gobernar, sin legitimidad de origen, por seis años más, mientras que Diosdado Cabello, quien representa el ala dura del oficialismo, ha ganado influencia luego de la derrota electoral de Nicolás Maduro y de su jefe de campaña, Jorge Rodríguez".
Pero, a esto hay que sumarle las tensiones diplomáticas con Colombia y Brasil, tradicionales aliados del oficialismo.
La insistencia de Maduro en decir que Machado está fuera del país busca desmotivar a los seguidores de la oposición
Además, continúa el encarcelamiento de líderes o aliados de la oposición, por lo que Laboratorio de Paz considera que los venezolanos deben "prepararse para un nuevo pico represivo", esto debido a que "es previsible que el régimen de Maduro intensifique la represión para acallar las voces disidentes tras su juramentación. La sociedad civil debe estar preparada para documentar de forma rigurosa cualquier violación de derechos humanos, incluyendo detenciones arbitrarias, torturas, desapariciones forzadas y asesinatos", insistieron en su informe sobre escenarios.
Para el Laboratorio de Paz, es necesario fortalecer la organización interna ante lo que consideran un escenario adverso, por lo que es fundamental que las organizaciones de la sociedad civil refuercen sus mecanismos de seguridad, de comunicación interna y de protección de sus miembros.
ANA MARÍA RODRÍGUEZ BRAZÓN - CORRESPONSAL EL TIEMPO - CARACAS