Incluir la actividad física en la rutina diaria resulta complicado en un inicio cuando el cuerpo no ha estado acostumbrado a ello. Sin embargo, iniciar con una rutina que no demande demasiado esfuerzo, puede ser la mejor opción para así poder adaptarse a ello con facilidad.
Conforme a los criterios de
La opción más viable para muchos es el gimnasio, pues es un lugar que cuenta con todos los espacios y máquinas necesarias para permitirle a las personas ejercitar de manera indicada su organismo y así poder alcanzar cada uno de sus objetivos satisfactoriamente.
Aunque este puede ser el primer paso para muchos, otras personas prefieren algunas formas menos costosas como las caminatas por espacios abiertos o las rutinas que se puedan realizar en casa. Es por esto que actualmente existen muchos videos en internet acerca de ello.
Es así que se han viralizado muchos movimientos y planes de ejercicio que han practicado diferentes personas y les han ayudado a alcanzar de manera eficiente sus objetivos. De la misma manera, existen publicaciones en las que se explican distintos movimientos cada uno con una intención distinta.
La plancha suele ser uno de los movimientos que más se realiza por los beneficios que trae al abdomen, pues le brinda un esfuerzo constante y así se podrá tener la zona más fuerte y plana. Además, protege la zona lumbar, es decir, la parte baja de la espalda. Es por esto que debe incluirse en la rutina diaria para así cuidar la salud ósea también.
A esta práctica se le suelen hacer diferentes variaciones y así que son muchas las opciones y maneras en las que se puede realizar para obtener diferentes beneficios de cada una de ellas. Una de las más famosas es la plancha invertida, mucho más funcional que la tradicional.
Beneficios de la plancha invertida
La plancha invertida es un ejercicio que cuida y protege la zona lumbar, pero además posee distintos beneficios adicionales:
- Fortalece los hombros y las muñecas: aunque puede resultar algo incómodo, molesto, e incluso, doloroso, especialmente para la zona de las muñecas. Esta práctica aumenta la fuerza de ellas y los hombros.Si el dolor es muy fuerte, es mejor detenerse y revisar si la técnica está bien aplicada.
- Aumenta la musculatura de los isquiotibiales (la parte trasera de los muslos).
- Ejercita la zona lumbar: incluso lo hace tanto o más que la plancha convencional.
¿Cómo hacer la plancha invertida?
En primer lugar, extienda una esterilla y siéntese sobre ella con las piernas juntas y extendidas. Luego siga los siguientes pasos:
- Apoye las manos en el suelo a ambos lados del cuerpo.
- Échese hacia atrás formando un ángulo de 45º entre el suelo y el tronco.
- Gire las muñecas hasta que las puntas de los dedos de las manos miren hacia los pies.
- Abra el pecho juntando las escápulas.
- Active el abdomen y los glúteos. Asegúrese de que la pelvis está bien arriba, ya que tiende a caer.
- Los pies deben estar totalmente apoyados en el suelo.
- La cabeza debe estar en línea con el resto del cuerpo.
- Mantenga esa posición apretando los glúteos y el core durante unos 10 segundos.
- Descienda lentamente y apoye el cuerpo en el suelo.
Es importante realizar cada movimiento de manera lenta y segura para brindarle un estado saludable al organismo y así evitar posibles lesiones. Si en algún punto del ejercicio siente algún tipo de dolor incontrolable, debe detenerse y asegurarse de no estar esforzando de más su cuerpo.
Recuerde que antes de incluir este o cualquier otro movimiento en su rutina de actividad física, debe consultar con un especialista que valide que ninguno de estos esfuerzos le traerá efectos secundarios no deseados a la salud de su cuerpo y que usted puede realizarlos sin ningún problema.
ERIKA LUCIA IBAÑEZ GARCIA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO