Por cada 10 cigarrillos que entran al Atlántico, 5 son de contrabando", afirma con preocupación la Secretaria de Hacienda del Departamento, Nini Cantillo, destacando el impacto devastador que este delito tiene en las finanzas del sector público.
Conforme a los criterios de
El contrabando de cigarrillos en el Atlántico está costando al departamento una suma alarmante de $40 mil millones anuales, según lo reveló la Secretaria de Hacienda, Nini Cantillo. Este delito no solo afecta las arcas públicas, sino que también compromete los sectores más sensibles de la población, como la salud, la educación y el deporte, que dependen de los impuestos generados por la venta legal de estos productos.
"Estas rentas están directamente relacionadas con las inversiones que el departamento puede realizar en hospitales y colegios", explicó Cantillo. La funcionaria destacó que la magnitud del problema es tal que la mitad de los cigarrillos que se consumen en el Atlántico provienen del contrabando. "Es urgente que las autoridades trabajen de manera conjunta para combatir este flagelo, porque afecta a todos los atlanticenses".
En el marco del más reciente Comité Interinstitucional Anticontrabando, la Secretaría de Hacienda presentó los resultados de su programa de lucha contra este fenómeno. Durante el primer semestre del año, el programa ha logrado sensibilizar a más de 5.000 personas en 1.383 visitas a establecimientos comerciales.
Como resultado de estos operativos, tres negocios fueron clausurados y 59 personas detenidas por su participación en actividades ilegales. Asimismo, se incautaron 2.603 unidades de mercancía ilegal, entre ellas cigarrillos, cervezas y licores de procedencia tanto nacional como extranjera.
El impacto en la salud y la economía
El contrabando no solo afecta las finanzas del departamento, sino también la salud de los consumidores. Los productos ilegales, como los cigarrillos y licores adulterados, representan un riesgo significativo para la integridad de quienes los consumen.
La subsecretaria de Rentas, Claudia Rojas, instó a la ciudadanía a ser conscientes de los peligros que estos productos representan y a preferir la compra en establecimientos autorizados. "La invitación es a pensar en nuestro bienestar y la sanidad de todos al comprar productos en tiendas autorizadas", señaló.
Rojas también destacó que la comercialización ilegal de estos productos reduce las inversiones en salud pública y en la infraestructura educativa, lo que afecta directamente la calidad de vida de los habitantes del departamento.
Un frente común contra el contrabando
El combate a este delito ha requerido la colaboración de diversas entidades. La Federación Nacional de Departamentos, la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa), la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), la Policía Nacional, la Fiscalía General de la Nación y la Unión Nacional de Comerciantes (Undeco) son solo algunas de las instituciones que, junto con la Gobernación del Atlántico, han intensificado sus esfuerzos para frenar esta problemática.
El coronel César Sarabia, subcomandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, aseguró que el nuevo modelo de la institución ha reforzado las estrategias de lucha contra el contrabando, con especial atención en la zona metropolitana de Barranquilla, donde se concentra la mayor actividad ilegal. "Ponemos todas las capacidades de nuestro talento humano y tecnológico para lograr el éxito en la erradicación de estas prácticas ilegales", afirmó Sarabia.
El contrabando de cigarrillos y licores no solo mina las finanzas del departamento, sino que también pone en riesgo la salud de sus habitantes. Las autoridades han hecho un llamado a la ciudadanía para que apoyen la lucha contra este delito, adquiriendo productos en establecimientos legales y evitando el consumo de mercancías de origen dudoso.