A lo largo del territorio de Estados Unidos, el sarampión ya causó más de 1.000 contagios, con presencia en 30 estados diferentes, por lo que las autoridades sanitarias federales despertaron la alarma y recomendaron a los ciudadanos que se vacunen contra la enfermedad.
Hasta el 15 de mayo del 2025, 31 jurisdicciones han confirmado un total de 1.024 casos de sarampión, informan en su página web oficial los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Los estados que registraron casos de sarampión son los siguientes: Alaska, Arkansas, California, Colorado, Dakota del Norte, Florida, Georgia, Hawái, Illinois, Indiana, Kansas, Kentucky, Nueva York, Luisiana, Maryland, Michigan, Minnesota, Misuri, Montana, Nueva Jersey, Nuevo México, Ohio, Oklahoma, Pensilvania, Rhode Island, Tennessee, Texas, Vermont, Virginia y Washington.
De esta estadística se desprende también que aproximadamente el 96 por ciento de los enfermos contagiados no están vacunados contra el sarampión, lo que resalta la importancia de la protección contra la enfermedad.
Asimismo, la agencia encargada de la prevención de enfermedades en Estados Unidos agregó que en el 2025 se han notificado 14 brotes (definidos como tres o más casos relacionados) y el 92 por ciento de los casos (947 de 1.024) están asociados a un brote. En comparación, durante el 2024 se notificaron 16 brotes y el 69 por ciento de los casos (198 de 285) estuvieron asociados a un brote.
La vacuna contra el sarampión en Estados Unidos
En su sitio web oficial, los CDC indican que la mejor forma de protegerse y de proteger a sus seres queridos de la enfermedad es vacunándose contra el sarampión, las paperas y la rubéola.
Una sola dosis de la vacuna contra el sarampión otorga una protección del 93 por ciento. Foto:Getty Images
Una sola dosis de la vacuna MMR otorga un 93 por ciento de protección, mientras que dos dosis de la vacuna proporcionan un 97 por ciento de protección contra el sarampión, de acuerdo a los CDC. De este modo, la agencia recomienda a los ciudadanos que se contacten con su médico o departamento de salud local para recibir la vacuna y protegerse contra la enfermedad que ya superó los 1.000 casos en Estados Unidos.