En abril de 2022, Laura Jennings, una mujer de 40 años de Reino Unidos, se percató de que una de las uñas de su pie izquierdo tenía una mancha de color café, por lo que decidió aplicar esmalte para ocultarla, ya que pensó que era un hematoma común.
De acuerdo con lo expresado por la paciente en los medios locales, ella es una persona muy activa físicamente y en ocasiones se golpea con las cosas sin darse cuenta y por eso creyó que el moretón desaparecería en cuestión de días.
La uña se empezó a desintegrar mientras ella retiraba el producto. Foto:iStock
Sin embargo, cuando estaba retirando el producto, se dio cuenta de que la uña de su dedo gordo se estaba desintegrando por completo, pero en vista de que no sentía ningún dolor, no considero importante buscar ayuda médica.
Al poco tiempo, Jennings logró programar una consulta telefónica con su doctor de cabecera, debido a que la crisis sanitaria aún afectaba el sistema de salud de su ciudad, obligándola a enviar fotografías de su pie por correo electrónico.
El médico pensó que solo era una infección por hongos común. Foto:iStock
Tan pronto como el especialista revisó las imágenes, le aseguró que no era una situación grave, ya que se trataba de una infección por hongos en las uñas, por lo que le recetó un ungüento antimicótico, mientras hacían algunos análisis de laboratorio.
Semanas más tarde, los resultados no mostraron signos de ninguna contaminación similar, pero aun así el doctor le sugirió que siguiera con el tratamiento, ya que según él, en los meses posteriores todo volvería a su estado normal.
Así descubrieron que era cáncer de piel
Un año después del diagnóstico, la mujer seguía presentando la misma molestia en su pie izquierdo, por lo que, en medio de la preocupación, volvió a programar una cita médica para que le practicaran más estudios.
Al encontrarse con el especialista, este le informó que su caso estaba relacionado con un melanoma lentiginoso acral (ALM), un tipo de cáncer de piel inusual que se desarrolla en las palmas de las manos, plantas de los pies y debajo de las uñas.
La mujer fue sometida a dos cirugías. Foto:iStock
En cuestión de días, Jennings tuvo que someterse a una intervención quirúrgica para que le retiraran parte del tumor, pero al poco tiempo los especialistas decidieron que lo mejor era apuntarle parte del dedo para eliminar las células dañadas.
Si bien hasta el momento la causa de este cáncer sigue siendo un misterio, la mujer asiste sin falta a los controles regulares, antes de que pueda considerarse una persona libre de la enfermedad, y sabe que existe una probabilidad de que la enfermedad vuelva a aparecer.
Todo lo que debe saber sobre el cáncer de piel | Le tengo el remedio | El Tiempo
STEPHANY GUZMÁN AYALA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL