Malas noticias para Luis Díaz y Liverpool: el derbi no se juega y fue aplazado

Liverpool visitaba este sábado Goodison Park para jugar el clásico de la ciudad contra Everton, pero las condiciones meteorológicas fueron una gran preocupación para los dos equipos que se unieron para no jugar.

"Debido al riesgo para la seguridad en el área local debido a las fuertes ráfagas de viento y a una advertencia de un viento fuerte que permanece vigente hasta las 6 de la mañana del domingo, el partido de hoy (sábado) deberá posponerse", dijo el Everton en un comunicado oficial.

Oposición de Liverpool

El cuadro Red, líder de la Liga Premier con 35 puntos, abría la jornada sabatina de la Premier League contra su clásico rival. Sin embargo, el Ayuntamiento de Merseyside decidió que el encuentro no se jugara porque era un riesgo latente para los aficionados y jugadores.

“Sabemos que esto será profundamente decepcionante para los aficionados y la gente que vendría, pero la seguridad de todos de suma importancia", indicó el Liverpool.

La Oficina Meteorológica ya había informado que las condiciones climáticas no eran las mejores, los fuertes vientos y las lluvias eran un peligro para todos los protagonistas de un encuentro que prometía ser vibrante.

La tormenta es un riesgo

"Con los meteorólogos de la Oficina Meteorológica colocando la región bajo una advertencia meteorológica ámbar, pronosticando ráfagas de hasta 70 mph, la policía de Merseyside había emitido una advertencia contra todos los viajes ‘no esenciales’ para el sábado, cuando se esperaba que los vientos alcanzaran su punto máximo", explicó en un informe Liverpool Echo.

"Se tomó la decisión de continuar las discusiones hasta el sábado, momento en el que la tormenta Darragh llegaría y se podría tomar una decisión basada en la gravedad de las condiciones", agregó.

La decisión final del Ayuntamiento de no jugar el duelo llegó horas antes de que empezara a rodar el balón, “debido al riesgo para la seguridad en el área local debido a las fuertes ráfagas de viento. y una advertencia ámbar de vientos severos que permanece vigente hasta las 6 a.m. del domingo".

Everton fue el más firme en la discusión de no jugar el partido por una tragedia que lo golpeó hace 20 años en hoy llamado King Power Stadium de Leicester. Un aficionado conocido como Bernard Murphy murió después de que una valla de madera, desprendida por los fuertes viento, lo golpeara y lo ocasionara una herida mortal.

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