‘Los hechos hablan por sí mismos’: Lafaurie frente a violencia del Eln en Norte de Santander y suspensión de diálogos

José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán e integrante de la delegación de Gobierno ante el Eln, se refirió este sábado en su columna semanal a la decisión del gobierno del presidente Gustavo Petro de suspender los diálogos tras la escalada violenta de la guerrilla en la región del Catatumbo, Norte de Santander.

El líder gremial hizo un recuento de los hechos que tienen hoy al proceso sumido en una profunda crisis y al borde de su cierre definitivo. Además, como lo ha hecho en otros espacios, insistió en que las acciones del Eln contradicen su discurso.

“En efecto, a lo largo de las negociaciones, mientras el Gobierno dice y quiere una cosa en el marco de la Paz Total, otra muy diferente dice y hace el Eln, pero, en últimas, los hechos hablan por sí mismos, y no me refiero a los de 50 años de negociaciones fallidas y violencia indiscriminada, sino a los hechos más recientes, que hablan fuerte y estrechan el cerco a las negociaciones”, señaló Lafaurie.

El negociador recordó el ataque contra la base militar de Puerto Jordán en Arauca, las declaraciones de Pablo Beltrán en las que manifestó que no buscan un acuerdo para antes de 2026, el plan para asesinar a Álvaro Jiménez que denunció el comisionado Otty Patiño y la guerra con las disidencias de las Farc que inició el jueves.

“Termino estas líneas, ya no en plan de agorero, sino con la contundencia de los hechos que hablaron: El presidente Petro le anunció al país: “Lo que ha cometido el ELN en el Catatumbo son crímenes de guerra. Se suspende el proceso de diálogo con este grupo. El ELN no tiene ninguna voluntad de paz”. Lo había dicho Otty Patiño en su carta: la paciencia del gobierno no es infinita”, añadió Lafaurie.

‘El Eln está cometiendo crímenes de guerra’

Estas declaraciones se suman a las de otros negociadores, entre ellos las dos principales caras de la delegación de Gobierno: Vera Grabe e Iván Cepeda. La jefa del equipo negociador dijo que las principales víctimas de la “operación a gran escala” contra las disidencias son población civil, firmantes de paz y líderes sociales.

“Nosotros habíamos advertido en la mesa desde noviembre, porque nos habían llegado noticias de que la situación se estaba complicando en el Catatumbo. Habíamos advertido que se atendiera esa situación porque iba a pasar lo que efectivamente pasó. De nuestra parte, vamos ocho meses buscando reactivar la mesa, haciendo todos los esfuerzos con la comunidad internacional, con toda la participación de la sociedad para que el proceso avanzara”, señaló.

El congresista, por su parte, añadió que esta acción armada, que por ahora deja al menos 20 muertos, arrancó con el traslado de tropas desde Arauca a Catatumbo con la idea de quitarle control territorial y de rentas ilícitas a las disidencias. 

“Es una operación militar que está haciendo el Eln (...) con el propósito de que los combatientes agredan a la población sin ninguna clase de atadura de carácter familiar, sentimental o de conocimiento de a quienes están asesinando, secuestrando y masacrando”, afirmó.

CAMILO A. CASTILLO
Redacción Política
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